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Cannes.— Aplausos efusivos que se prolongaron por largos minutos y cimbraron la Sala Debussy demostraron el poderoso efecto que generó el filme mexicano Perdidos en la noche, dirigido por Amat Escalante.
El thriller con tintes de cine negro del director guanajuatense se presentó en la sección oficial del festival, Cannes Premiere, aunque son películas que no compiten.
La cinta, que se adentra en los entresijos de la violencia del arte, de las redes sociales y del tejido social del México actual permeado por el narcotráfico, la red de influencias y el desequilibrio de poder, es protagonizada por Juan Daniel García Treviño, Bárbara Mori, Ester Expósito y Fernando Bonilla.
A diferencia de las otras películas de Amat (Los bastardos, Heli, Sangre) en las que el director utiliza la violencia explícita para sacudir conciencias, con Perdidos en la noche opta por construir un filme enigmático. Al momento de escribirlo, contó Amat, estuvo leyendo a Fiódor Dostoyevsky y viendo películas clásicas.
“Estoy muy satisfecho, al igual que todo el equipo que está aquí conmigo hoy y con los que he hecho una colaboración muy bonita. Esto es el fruto de ese esfuerzo colectivo”, compartió Escalante a EL UNIVERSAL desde las escalinatas de salida de la sala, en la que los asistentes aún le aplaudían.
El director se sabe querido en la Riviera francesa, pues aquí se hizo con el premio a Director por su filme Heli, en 2013.
Afuera de la sala y rodeado de otros medios, Amat ahondó en la intención de este filme:
“Más que de la violencia en sí, yo quería hablar del uso de la violencia en el arte como inspiración y cuestionar eso. De cómo puede utilizarse de buena y de mala manera. Ese era el principal objetivo y el contexto de México que ya todos conocemos y que es difícil evadir”.
Tarde de éxtasis
Juan Daniel, protagonista del filme, expresó su emoción por estar en Cannes: “Nunca había venido y estoy súper agradecido y contento de que reconozcan nuestro trabajo aquí”.
El actor, que se hizo famoso gracias a su debut en la cinta Ya no estoy aquí (2019), en la que ganó un Ariel como Mejora actor revelación, contó que le gustaría seguir haciendo cintas como Perdidos en la noche, con historias reales, así como continuar en la danza y la música, a la que se dedicado desde niño.
“Ya estoy buscando cumbia aquí en Cannes, a ver en dónde se arma”, comentó entre risas.
“Trabajar con Amat fue increíble porque es una persona generosa. Tiene un gran corazón. Más allá de ser un director brillante es alguien con quien puedes hablar y sentir”, agregó.
Por su parte, Bárbara Mori afirmó que éste ha sido uno de los papeles más importantes de su carrera.
“Es uno de los proyectos que más me han transformado en todos los sentidos. La historia es dolorosa porque es algo que vivimos constantemente, la injusticia de clases, donde los ricos atropellan a los pobre, pero las formas de Amat siempre son conmovedoras”, destacó.
La actriz, quien explicó que lleva 20 años sin hacer televisión, explicó que este proyecto le ha inyectado más ganas para seguir haciendo este tipo de cine y de trabajar con más directores como Amat.
La actriz acaba de filmar un proyecto con el director peruano Ricardo de Montreuil llamado Mistura y está buscando financiamiento para dirigir su primer largometraje.
“Lo escribí en la pandemia. El guion está inspirado en mi infancia. Crecí con un padre violento y alcohólico así que hablo de la violencia intrafamiliar y de las chiquitas que van en búsqueda de la mamá desaparecida”.