En una reunión de trabajo con diputados y senadores de la realizada el pasado jueves 4, la directora del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (), María Elena Álvarez-Buylla, habló por primera vez del destino de los fondos de los 91 fideicomisos de ciencia, de los 109 que se extinguieron en 2020, que en conjunto representaban un monto de 25 mil 741 millones 755 mil 587 de pesos.

“¿Cómo se han integrado al financiamiento de la ciencia los recursos que estaban en los fideicomisos?”, preguntó el senador priista Jorge Carlos Ramírez Marín y presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología. La funcionaria respondió que los fondos fueron para la fabricación de ventiladores respiratorios “y el resto de los recursos, pues regresaron a donde tenían que estar: a los recursos disponibles de la Tesofe (Tesorería de la Federación) para proyectos prioritarios a nivel del gobierno federal, incluyendo los de ciencia y tecnología, porque el presupuesto de ciencia y tecnología de egresos de la federación no ha hecho más que aumentar en becas y en todos los demás aspectos que incluyen la agenda de Conacyt”.

Fondos del Conacyt van a obras clave del gobierno
Fondos del Conacyt van a obras clave del gobierno

En noviembre de 2020, la extinción de 109 fideicomisos públicos se concretó a través de un decreto presidencial publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), “con el propósito de combatir el despilfarro de los bienes y recursos nacionales, y la administración de los recursos con eficiencia, eficacia, economía, transparencia y honradez”, según se lee en los lineamientos de Austeridad republicana. En aquella ocasión, se estableció que los recursos de los fideicomisos serían usados para combatir la pandemia de y “para procurar la estabilización del balance fiscal federal y el pago de las obligaciones previamente contraídas por los vehículos financieros a que se refiere el presente Decreto con anterioridad a la entrada en vigor del mismo”. Sin embargo, no se había indicado con precisión hacia dónde se dirigiría ese dinero.

La extinción de los fideicomisos es un tema cercano para la comunidad académica de México, pues durante su eliminación, estudiantes, profesores e investigadores, y comunidad de mexicanos en universidades extranjeras como Harvard, Oxford y Yale, protestaron contra su desaparición. Ahora, académicos reaccionan con sorpresa al conocer el destino de estos fondos, pues se demostró que la titular del Conacyt no considera que la ciencia y la educación sean proyectos prioritarios para el país, dijo a EL UNIVERSAL la doctora en historia e investigadora del Centro de Investigación y Docencia Económicas, Catherine Andrews.

“Es una declaración sumamente lamentable e incluso preocupante. Indica que ella, como directora del Conacyt, no considera su área, misma que ella dirige, como prioritaria. No considera que la educación superior sea un objetivo principal para el gobierno, tanto así que ha preferido redirigir recursos que estaban etiquetados y resguardados bajo el sello de Conacyt a otras actividades fuera del ambiente de la educación superior. Para mí es gravísimo, la educación debe ser algo prioritario”, afirmó Andrews y recordó que durante la campaña electoral de AMLO “se hizo un compromiso para gastar lo propuesto en la Ley de Ciencia y Tecnología, es una propuesta que no se ha cumplido y, lo peor, se están destinando esos recursos fuera del área científica”.

Por su parte, el investigador David Romero, del Centro de Ciencias Genómicas de la y miembro de ProCienciaMx, considera que “quedó muy claro que estos recursos no se están invirtiendo en ciencia”, y lamentó la situación porque representa “una pérdida efectiva de recursos con los cuales se apoyaba la ciencia mexicana y que no parece estar siendo compensada de ninguna manera”.

La investigadora del Cinvestav Alma Maldonado duda si la declaración de fue “ingenua o no”, pero sí está segura de que se trata de “un gran escándalo” que considera importante destacar. “La ciencia pierde el dinero y nos quedamos sin recursos que se utilizaban para hacer proyectos de investigación (…). Fue una decisión que a todas luces era quitarle recursos al desarrollo científico, tecnológico y de innovación de este país”. La investigadora describe que el manejo de los fondos de los fideicomisos se caracterizó por “borroso” y “opaco” y considera que la gravedad de esta movida se verá reflejada con el paso de los años, pues se está “dinamitando” un camino que a la comunidad científica le llevó años construir.

“Desafortunadamente esto apenas empieza y apenas vamos a ver las consecuencias de haber eliminado este recurso” para un sector “siempre golpeado” por contar con poco presupuesto, dijo Maldonado, y agregó: “está claro que lo que más les interesa (al gobierno) es el dinero para sus proyectos”.

Además de la sorpresa causada por el destino de este dinero que estaba etiquetado para la ciencia, Brenda Valderrama, doctora en investigación Biomédica Básica de la UNAM e integrante de ProCienciaMx, denunció que “beneficiarios de programas posdoctorales, como Cátedras por México, ya no trabajan en ciencia, sino que ahora se reportan precisamente con estos proyectos de la presidencia: Tren Maya, Dos Bocas y Sembrando vida. Entonces no solamente se fue el dinero de los fideicomisos, sino el dinero de otros programas de apoyo a la comunidad científica”.

También lee: 

Fondos del Conacyt van a obras clave del gobierno
Fondos del Conacyt van a obras clave del gobierno


“Un Conacyt colapsado”

Académicos cuestionaron otros puntos de la reunión de la titular de Conacyt con legisladores de diversos partidos.

“La evasión de preguntas fue la tónica de toda la reunión, por eso fue virtual, para poder abstraerse de la necesidad de responder directamente”, dijo Valderrama.

Entre las preguntas evadidas por Álvarez-Buylla destacaron las que hacía referencia al nombramiento de José Antonio Romero Tellaeche, el cual se ha denunciado que no fue legal. “Es evidente que Álvarez-Buylla y no tienen interés en platicar con la comunidad”, agregó Andrews, quien fue destituida como secretaria académica del por el actual director.

Otro tema que causó preocupación fue el sesgo que hay en la forma de plantear la ciencia de la titular del Conacyt. “Si logramos tener una Ley general de ciencia y tecnología e innovación razonable, podremos retomar el rumbo en unos pocos años, si no, nos puede llevar varias generaciones. Así de grave es la situación”, sostuvo Valderrama.

Álvarez-Buylla indicó que el presupuesto a Conacyt se ha incrementado. Sin embargo, los datos señalan que en 2021 el Consejo contó con 26 mil 573 millones 104 mil 028 pesos y este año cuenta con 29 mil 564 millones 150 mil670 pesos. El aumento es mínimo, pues David Romero pode considerar la actual inflación del 8%, el nivel más alto que se ha alcanzado desde 1997.

Los académicos consultados concluyen que esta reunión de trabajo con legisladores reveló un “Conacyt colapsado” en el que impera la incertidumbre. “Esperamos una respuesta clara y esperamos datos, no una ideología, eso es lo que esperamos”, concluyó Romero.

María Elena Álvarez-Buylla
Directora de Conacyt
"Los recursos regresaron a donde tenían que estar: a la Tesofe, para proyectos prioritarios a nivel del gobierno federal”

Alma Maldonado
Investigadora del Cinvestav
"Desafortunadamente esto apenas empieza y apenas vamos a ver las consecuencias de haber eliminado este recurso” 

Catherine Andrews

Doctora en Historia e investigadora del CIDE
"Es una declaración lamentable e incluso preocupante. Indica que ella, como directora del Conacyt, no considera su área como prioritaria”

91 FIDEICOMISOS de CIENCIA,
de un total general de 109,se extinguieron en 2020.

25,000 Millones de pesos monto total de los fideicomisos de ciencia.

30 proyectos prioritarios entre los que se encuentra el Tren Maya y la refinería Dos Bocas. 

para recibir directo en tu correo nuestras newsletters sobre noticias del día, opinión, planes para el fin de semana, Qatar 2022 y muchas opciones más.