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Bruselas.— Para reducir los riesgos y maximizar los beneficios de sus actividades delictivas en el mercado de la cocaína, algunos de los principales cárteles mexicanos están utilizando el “modelo de franquicia” en sus operaciones hacia Europa.

“Estamos enfrentando una nueva era”, dice en exclusiva a EL UNIVERSAL Rob Wainwright, director de Europol.

“El mercado europeo de la droga no es dominado por estructuras de la mafia [con excepción de la Ndrangheta italiana], sino por grupos pequeños de diferentes países y nacionalidades que colaboran entre sí, cada uno aportando sus especialidades”, explica.

Wainwright señala: “Este es el nuevo modelo comercial europeo y pensamos que los grupos mexicanos y colombianos se están adaptando a ello, buscando colaboradores establecidos en Europa”.

El director de Europol comenta que el mecanismo consiste en la venta a pequeños grupos delictivos locales de la “marca de la empresa criminal”, así como de la “licencia operativa”, la cual incluye el acceso a la droga sin intermediarios, el acercamiento con diversos contactos y el método para facilitar el trasiego de la cocaína.

Este fenómeno constituye un cambio de estrategia de los narcotraficantes mexicanos en sus planes para extender su negocio a Europa.

Europol alertó en 2013 sobre la intención de los cárteles mexicanos, principalmente el de Sinaloa y Los Zetas, de establecerse en Europa de manera permanente para desplazar a los grupos colombianos, como lo hicieron en Estados Unidos.

Tres años más tarde, el informe 2016 sobre el mercado de la droga en la Unión Europea, que elaboraron de forma conjunta Europol y el Observatorio Europeo de la Droga y las Toxicomanías (OEDT), constata que los colombianos continúan siendo los protagonistas en el abastecimiento del comercio europeo de la cocaína, en complicidad con diversos grupos locales, incluyendo italianos y españoles.

Wainwright explica que no es que los colombianos hayan prevalecido frente a la ofensiva de los cárteles mexicanos, entre ellos el de Sinaloa, que controla 35% de las exportaciones de cocaína de Colombia —equivalente a 100 toneladas anuales—, más bien las organizaciones “entendieron que hay oportunidades de negocio para todos, porque el mercado no puede ser dominado por un solo grupo”.

Otro comportamiento novedoso, identificado por los servicios de inteligencia europeos, es el creciente uso del continente como trampolín para enviar metanfetamina producida en México a Australia y los mercados emergentes de Asia.

“México es un importante productor de metanfetamina y es probable que esté teniendo lugar un tráfico regular de América Latina a los mercados de Australia y Asia a través de la Unión Europea”, detalla el informe.

El documento menciona el caso de un “correo” interceptado en un aeropuerto de Alemania. La metanfetamina, originaria de México y con una pureza de 97%, salió de Argentina y tenía como destino final Japón.

En entrevista, Wainwright se congratula por la recaptura de Joaquín El Chapo Guzmán, calificándola como “un gran éxito policiaco”, que se traducirá en un impacto en las actividades de la organización.

“Para la comunidad policiaca, el atrapar a alguien que ha sido una figura tan importante en el mercado ilícito de la droga no sólo en México y Sudamérica, sino a nivel mundial, es muy importante”, asegura.

Al ser cuestionado sobre el acuerdo de cooperación operativa, técnica y estratégica entre la Procuraduría General de la República y Europol, comentó que es muy probable que las pláticas no concluyan antes de finales de 2017.

En la actualidad, Colombia es el único país latinoamericano que cuenta con un acuerdo operacional con Europol, en tanto que Brasil tiene pláticas en curso.

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