fanny.ruiz@eluniversal.com.mx

Las pérdidas materiales no le interesan a Reyna. Lo que le dolió fue perder a sus dos perritos y el susto que vivió su familia. “Afortunadamente mis hijos y mi esposo estamos bien. Perdí mi refrigerador, mi estufa y todo lo que había en uno de mis cuartos”, dice.

Desde hace 40 años vive en Prolongación Río Mixcoac, manzana 2, lote 6, pero las lluvias de ayer le quitaron parte de su patrimonio. Un talud de tierra arrasó con su casa.

A las 6 de la tarde, mientras llovía, recuerda haber oído un fuerte trueno. Eran las piedras que se desprendieron de la tierra y cayeron sobre su techo y una de sus paredes.

La casa de Reyna estaba conformada por dos cuartos y un baño, así como un espacio donde tenía su lavadero.

En esa casa vivió durante 40 años junto con su esposo y sus tres hijos. Hoy, después de ver lo que ocurrió, prefiere abandonar su hogar y comenzar una nueva vida.

Reyna se sintió tranquila al ver que toda su familia estaba sana y salva, su único dolor fue perder a sus mascotas:

“Tenía dos perritos, estoy segura que quedaron sepultados porque uno estaba amarrado y la otra estaba en la puerta. Me duele mucho porque no había modo de que se pudieran salvar”, dice mientras un par de lágrimas ruedan sobre su mejilla.

Reyna asegura que las autoridades les informaron que el predio donde vivían estaba en riesgo, pero “por cuestiones personales” no se fue.

Reconoce que ya no pueden hacer nada y agradece a las autoridades el apoyo: “A través del doctor De la Rosa el delegado nos mando solución para esta parte”.

Dijo que les darían un apoyo para que paguen renta.

Google News

Noticias según tus intereses