Ena, de 19 años, tenía sólo seis meses de haberse mudado a un lado de la persona que le quitó la vida. Estaba estudiando la carrera de Contaduría y trabajaba en la oficina de su madre, era la mediana de 3 hermanos.

La joven tenía poco de haberse independizado, por lo tanto vivía con su hijo de un año en el municipio de Xalisco, Nayarit. Antes de su muerte, Ena alcanzó a ver a su victimario y pidió ayuda a un anigo por un mensaje de voz de Whatsapp.

La víctima había estado casada con José Luis N, el padre de su hijo, pero se separó de él hace un año, por lo que vivió un tiempo con su madre y hermanos; después se fue al domicilio donde fue asesinada por su vecino, un hombre de 35 años aproximadamente identificado como Ignacio “N”.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Elizabeth N, hermana mayor de Ena, narró que la última vez que vio a su hermana fue el pasado sábado, cuando salieron de la universidad, después la acompañó hasta su casa. Habían quedado de desayunar en familia al día siguiente.

“El domingo en la mañana le estábamos llamando, pero no nos contestaba, su celular nos mandaba a buzón; yo me preocupé y decidí ir a buscarla a su casa. Cuando llegué vi el portón de afuera abierto y entré a tocar la otra puerta”, señaló.

Su hermana destacó que tocó por mucho tiempo hasta que su sobrino se acercó a la puerta y sólo le señaló que su mamá estaba en su habitación.

“Yo estaba tocando la puerta de manera desesperada; al principio me imaginé que mi hermana pudiera estar dormida o a lo mejor desmayada en su cuarto y le hice señas al bebé para que me abriera la puerta”, dijo.

Elizabeth señaló que el pequeño no tenía la capacidad para abrir la puerta, sin embargo se esforzó y después de varios intentos logró abrir. Cuando Elizabeth cargó al niño se percató de una ligera mancha de sangre en su mejilla y se dirigió al cuarto de su hermana dónde la encontró muerta.

“Por la forma en que la encontré, era evidente que eso no lo había hecho sola, que alguien la mató. Fue horrible la sensación de encontrarla así, no toqué nada y salí corriendo a pedir ayuda”, aseveró.

Una vecina salió a auxiliarla y llamaron al 911 y a su madre.

La noche anterior, Ena vio venir el ataque de su victimario, se percató que se había brincado a su casa y le pidió ayuda a un amigo, quien se mantiene en el anonimato, por medio de un mensaje de voz de WhatsApp.

“¡Mi vecino se brincó la barda, ayúdame, ayúdame!". El mensaje fue enviado a las 12:30 de la noche del sábado, pero el remitente no se percató de la advertencia, sino hasta el día siguiente.

La hermana de la víctima narró que, en alguna ocasión, Ena le contó que su vecino “le causaba miedo”, pese a que nunca sufrió acoso o alguna falta de respeto de su parte, el sujeto no le daba “buena espina”.

El agresor confesó su crimen

De acuerdo con medios locales, el Ministerio Público señaló que Ignacio, al entrar a la vivienda, empujó a la joven madre con fuerza hasta llevarla a la recámara y con cuchillo en mano le provocó la muerte. Salió del lugar con la cartera y el celular de la víctima, los cuales fueron encontrados en el cateo a su domicilio.

De acuerdo con los vecinos, el agresor fue detenido en un ejido, propiedad de un pariente.

Tras su detención, la tarde del martes, en una audiencia pública, se le formuló la imputación por el delito de homicidio calificado en agravio de la joven de 19 años; Ignacio “N” aceptó el crimen que se le imputa.

Será hasta la audiencia del jueves donde narrará cómo perpetró el crimen de la joven. Por el momento, el juez ordenó el internamiento del inculpado en el Centro de Reinserción Social Venustiano Carranza de Tepic.

Por las personas que conocían a la familia del agresor, se sabe que Ignacio “N” acababa de salir de prisión en Estados Unidos, pero se desconocen los cargos que enfrentó.

José Luis, ex esposo de Ena, narró a EL UNIVERSAL que tiene conocidos en común con el asesino, a quien describen como un hombre violento y con problemas de drogadicción.

También le comentaron que en las redes sociales del asesino, publicaba comentarios relacionados a que sentía atracción por una de sus vecinas.

“Ena nunca me comentó que su vecino le causaba miedo; si me lo hubiera dicho yo hubiera hablado con su mamá y ayudarla a que se fuera a rentar a otro lugar, también por la seguridad de nuestro hijo”, señaló José Luis.

Tras el asesinato de Ena, señaló, un conocido le hizo saber que el agresor ya había hecho comentarios sobre ella, pero no le dijeron nada por desconocer de quién se trataba.

“Un amigo me platicó que una vez en un bar, el asesino comentó que tenía una vecina que se le hacía muy guapa, pero mis conocidos no me dijeron nada en su momento porque no se imaginaban a quién se refería”, dijo.

Siempre tenía una sonrisa en su rostro

El ex esposo de Ena destacó que ella era una persona muy alegre, que siempre tenía una sonrisa en el rostro, además de que era independiente y quería ser contadora como su madre, por lo que después de su separación siempre tuvo una buena relación con ella y con su familia.

“Ena era una mujer alegre, siempre tenía una sonrisa y le gustaba la música de banda. A pesar de que no nos entendimos como pareja, siempre tuvimos una buena relación, por nuestro hijo”, señaló.

Ena y José Luis habían contraído matrimonio en el 2014, cuando Ena apenas tenía 17 años, después tuvieron un hijo, pero un año después se separaron. Sin embargo, siempre tuvieron buena relación; José Luis se hacía cargo de su hijo cuando Ena iba a la Universidad.

“Quiero hacer un llamado a las mujeres a tomar precauciones extremas, como le pasó a Ena le puede pasar a cualquier mujer y no queremos que esto se repita”, destacó.

Su familia pide justicia

La familia de la víctima busca justicia. “Yo quiero que se haga justicia como se debe, y que no sólo este caso se resuelva, debido a que hay muchos más en espera de que se haga justicia para otras mujeres que han muerto a manos de personas que saben lo que hicieron y no han dado con ellas”, señaló Elizabeth.

En el caso de Nayarit, el delito de feminicidio aún no está tipificado en el Código Penal del estado. Además la solicitud para activar la Alerta de Violencia de Género se entregó a la Secretaría de Gobernación (Segob)en junio del 2016. La Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim) envió al gobierno nayarita 10 propuestas para eliminar los asesinatos de mujeres, las cuales hasta abril de 2017 no se habían cumplido.

Las recomendaciones alcanzan a ministerios públicos, jueces, al fiscal y al propio gobernador, cuya administración ha sido acusada ante la Procuraduría General de la República (PGR), la Segob y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por negarse a recibir denuncias por este delito e incluso por obstaculizar las investigaciones, siempre en favor de los agresores.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses