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Chihuahua.— Un ex agente de la policía municipal de esta capital acusado de por lo menos tres violaciones fue detenido en Aurora, Colorado, cuando intentó ingresar al domicilio de una mujer, de la que al parecer pretendía abusar.
Ricardo Corral, de 25 años, desertó de la Dirección de Seguridad Pública Municipal al saber que fue descubierto por sus propios compañeros como el responsable de varios ataques sexuales cometidos durante este año y se refugió ilegalmente en Estados Unidos, donde presuntamente cometió un hecho similar hace una semana y al pretender hacerlo nuevamente fue capturado.
De acuerdo con la Policía de Colorado, el intento de ataque ocurrió en un complejo de departamentos de la ciudad de Aurora (en la zona urbana de Denver), cuando Corral intentó forzar la puerta de una vivienda, propiedad de una mujer de origen latino, la cual pidió auxilio a gritos, acción que ahuyentó al agresor.
Vecinos del sector observaron cuando el ex policía se refugió en un restaurante cercano y dieron aviso a las autoridades, minutos después fue aprehendido. Los investigadores determinaron que Corral podría ser responsable de una violación ocurrida una semana antes en el mismo barrio. Tras varios interrogatorios aceptó los hechos. Ambas víctimas lo identificaron.
En abril pasado ocurrieron dos ataques sexuales en la ciudad de Chihuahua, en los dos casos con el mismo patrón. El primero se registró en la colonia Villa, la víctima fue una mujer de aproximadamente 30 años; el segundo en Riberas del Sacramento, en el que una adolescente de 14 años fue violentada.
La fiscalía de la entidad informó que Corral aprovechaba los recorridos de patrullaje que hacía como policía para detectar domicilios en los que a cierta hora hubiera mujeres solas, luego, fuera de turno, llegaba a bordo de una motocicleta, portando casco y lentes oscuros. Tocaba a la puerta con un paquete en la mano aparentando ser un mensajero, al ser atendido las amenazaba con su arma de cargo y abusaba de ellas. A finales de mayo cometió un tercer ataque en un local comercial. Sin embargo, cuando agredía a su víctima entró un cliente al establecimiento y Corral salió corriendo; dejó su cartera tirada en el piso.
El Richie, como lo apodaban sus compañeros, huyó llevándose una pistola calibre 45 y un rifle de asalto, que usaba en los operativos.
Tras su escape, Corral envió una carta por redes sociales a los policías de la ciudad, en donde daba a entender que se suicidaría, pero se trató de un distractor. De acuerdo con la Policía de Aurora, Corral permanece en un centro de detención sin derecho a fianza.
