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Luego de cobrar el rescate por la liberación de un adolescente, a quien mataron el mismo día de su secuestro, cuatro presuntos secuestradores fueron detenidos por la Fiscalía Especializada Contra el Secuestro y Extorsión.
El 28 de junio, la víctima, de 17 años de edad, se salió de su plantel educativo, ubicado en Jojutla, al sur del estado, para irse con una de las detenidas, conocida de él y ex empleada de un negocio familiar.
Los detenidos son dos hombres y dos mujeres. Uno de los varones es guardia de seguridad y originario del municipio de Tlaquiltenango; las mujeres tienen 23 y 40 años de edad con domicilio en Zacatepec y Cuernavaca.
La Fiscalía General del Estado informó que luego del secuestro, la familia de la víctima recibió una primera llamada en la que se les exigió el pago de dos millones de pesos como rescate.
Luego vinieron otras llamadas, negociaciones, amenazas y la reiterada negativa de los delincuentes por entregar una prueba de vida, hasta que el 5 de julio se realizó un operativo en el poblado de la Mezquitera, municipio de Tlaquiltenango, que concluyó con la detención de los cuatro implicados.
El reporte oficial indica que a los detenidos se les encontró una bolsa de plástico color naranja con 46 mil 225 pesos, producto del pago del rescate, dos teléfonos celulares con chip y un chip de telefonía celular.
Según la Fiscalía, la investigación permitió establecer que al menos dos de los detenidos tienen un vínculo con Florentino González López, quien actualmente cumple una sentencia de 26 años siete meses en el penal de Atlacholoaya por el delito de secuestro agravado, ilícito cometido en enero de 2013.
También son vinculados a Santa Palafox Jiménez, detenida y sentenciada a un año tres meses de prisión por el delito equiparado al secuestro por el mismo caso.
En su reporte, la FGE cita que el modus operandi de los detenidos es parecido al de los internos: Una persona establece un lazo afectivo con una potencial víctima y, tras ganarse su confianza, la exhorta a acudir a algún lugar específico dejándola vulnerable ante sus cómplices.
Debido a que la víctima conoce a su victimario, los delincuentes la privan de la vida casi de manera inmediata, tal y como ocurrió en el caso actual, que se sustenta con el reporte del Servicio Médico Forense.
Los presuntos delincuentes ya están a disposición del Ministerio Público por el delito de secuestro agravado.
spb
