Han puesto un alto a las actitudes prepotentes y llenas de ignorancia de Pedro Caixinha en Cruz Azul.
Más allá del resultado contra Xolos —que no se sabía al escribir esto—, el entrenador está en medio de una encrucijada, su directiva lo evidenció en un comunicado; no pasó desapercibido señalar a un futbolista rival como parrandero.
Totalmente falto de ética y con una desfachatez absoluta va por el futbol mexicano insultando, denostando, mintiendo y señalando. No es la función de un entrenador de futbol hablar en conferencias de prensa sobre las Fake News en el país, o sobre si el balompié no se juega con falda o aseverar qu e Leonel Medina es parrandero. No, el está en el banquillo de Cruz Azul para hacerlos campeones, no para ser un crítico del país, porque se atreve hasta señalar a los jardineros del Estadio Azteca porque en México así son, poco serios.
Por eso Cruz Azul tuvo que ofrecer disculpas, ya no podía aguantar su directiva otro exabrupto de esta baja categoría y de una evidente deficiencia en su orden de ideas al hablar de futbol. Caixinha ha sumado fracasos en Cruz Azul, e intentar desviar la atención del pésimo partido que dieron contra Puebla no justifica que señale a un futbolista como parrandero. La cúpula de Cruz Azul tiene demasiados problemas para dedicarle tiempo y darle importancia a un entrenador que más temprano que tarde despedirán. Así que hicieron lo correcto: si su técnico ventanea a un futbolista sin pruebas, sin argumentos sólidos, entonces ellos deben dejar en claro que no representa las ideas del club de futbol. Así de firme, así de contundente le dieron la espalda desde las oficinas, y tienen razón.
Como también deberían hacerlo con Ricardo Ferretti y su corriente e injustificado desplante de no dar conferencia de prensa porque la cadena Radiorama estaba transmitiendo en vivo, con todo su derecho y sin cometer ningún ilícito, en el post game del partido entre Atlas y Tigres.
Hay una gran confusión, los medios no son los enemigos de los equipos, simplemente hacen su trabajo, y si a Ricardo no le gusta que lo difundan por sus peladeces —según sus palabras—, entonces que no las diga, que se limite a hablar de balompié y que por primera vez en su vida no quiera ser el centro de atención. Lo que hizo el Tuca debe ser revisado por la Liga MX, por la directiva de Tigres y por supuesto por Radiorama, cadena que solamente hizo lo que tenía y quería hacer con todo el derecho.
Caixinha
hacía lo que se le pegaba la gana hasta que su directiva reaccionó, lo mismo debería suceder con Tuca , que da la impresión por las actitudes que demuestra, que es el hombre más importante de Tigres por encima de Miguel Ángel Garza o de la familia Zambrano, dueña de Cemex.
Han ensuciado al futbol con corrientadas de muy bajo nivel, no hay quien pueda defender lo hecho ni por Caixinha ni por Ferretti.
@gvlo2008
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