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Representantes de casi 30 asociaciones de la comunidad LGBTTTI y diputados locales del PRD alertaron sobre el riesgo de que en el diseño de la nueva Constitución se retroceda sobre el derecho que tienen al matrimonio igualitario, la adopción y a decidir sobre la identidad de su cuerpo.

“Preocupa que haya sobrerrepresentación de la derecha y ultraderecha que busque imponer candados sobre los derechos de esta comunidad lésbico, gay, transexual, travesti, transgénero e intersexual (…) Alerta que partidos disfrazados de izquierda, y tenemos que decir el nombre —Andrés Manuel López Obrador— bloqueen el avance de los derechos humanos de este sector”, declaró Diana Sánchez Barrios, de la asociación civil Pro Diana.

Para evitarlo, en los próximos 15 días se entregará a la mesa redactora de la Constitución Política de la Ciudad de México un documento en el que se demanda quede asentado la educación sexual de la reproducción asistida como un derecho humano, entre otras propuestas.

Entre 1995 y 2014, en el país se han registrado mil 218 homicidios por homofobia, según la Comisión Ciudadana contra los Crímenes de Odio por Homofobia de la organización civil Letra S, Sida, Cultura y Vida Cotidiana A.C.

De este tipo de homicidios, 976 fue de hombres, seguido por integrantes de la comunidad trans (travestis, transgénero y transexuales) con 226 casos reportados, y 16 mujeres.

En conferencia de prensa, la vicepresidenta de la Comisión de la Diversidad de la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México, Rebeca Peralta, adelantó que para salvaguardar los derechos de la comunidad lésbico-gay se analiza la implementación de sanciones a empresas e incluso a servidores públicos que violenten sus derechos.

Los asambleístas Rebeca Peralta e Iván Texta se comprometieron a defender los derechos alcanzados por esta minoría de la población y precisaron que en la nueva Constitución deberá quedar explícito se prohíba todo tipo de discriminación motivada por orientación sexual, identidad, expresión de género y características sexuales.

“La Carta Magna para la Ciudad de México no debe partir del binarismo de género para otorgar derechos, que en lugar de plasmarse hombre y mujer en los artículos se hable de personas, garantizando la aplicabilidad del respeto a los derechos humanos y al trato igualitario”, señaló Peralta.

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