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Un virus estomacal es el nuevo problema que enfrentan los organizadores y atletas de los Juegos Olímpicos de Invierno de PyeongChang, Corea del Sur.
El comité organizador confirmó 32 casos, en su mayoría miembros de la empresa de seguridad contratada para el mega-evento que comienza en tres días en Corea del Sur. En un primer momento se habló de hasta 41 casos sospechosos.
“Nos han recomendado tener especial cuidado en la higiene, básicamente. Y donde se detectó fue en la estación de tren de Jinbu”, dijo Carlos Pruneda, jefe de misión de la delegación mexicana, a EL UNIVERSAL Deportes.
“Nos comentaron que es norovirus”, agregó. “Todos [los mexicanos] estamos bien”.
Los enfermos, con vómitos y diarrea desde el fin de semana, fueron trasladados a un hospital y la mayoría fueron diagnosticados con el virus, altamente contagioso, que pudo ser transmitido por contaminaron en el agua o comida.
El norovirus, que contagia de persona en persona, provoca una súbita y fuerte gastroenteritis.
Christophe Dubi, director ejecutivo del Comité Olímpico Internacional (COI), explicó que el edificio donde se alojaba la mayoría de los enfermos no está cerca de ninguna de las dos Villas Olímpicas.
De los 32 infectados, 21 residían en el mismo edificio ubicado en el distrito de PyeongChang. (Con información de agencias)