Los aficionados del Cruz Azul se ilusionaron con el estadio Olímpico Universitario, por el buen paso en la Copa por México y porque será su casa en el arranque del Guardianes.
Ha sido tanto el gusto por el inmueble del Pedregal, que algunos seguidores se dieron cita para “adornar” partes del recinto.
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Los fanáticos pegaron estampas en las astas, a la altura del Pebetero y en otras áreas. Al enterarse, los encargados de la seguridad en CU mandaron rápidamente a quitar cualquier tipo de adorno celeste antes del choque entre La Máquina y los Tigres .
A pesar de que los cementeros seguirán en el Universitario hasta agosto, la base de aficionados deberá buscarse otras medidas para hacer del estadio su casa momentánea.