En una temporada en la cual se busca justicia ante los abusos de las autoridades hacia las minorías en Estados Unidos , los quarterbacks de raza negra aumentan en la NFL.
Por primera vez en la historia de la Liga, 10 pasadores afroamericanos arrancaron la Semana 1 de una campaña.
La lista inicia con Patrick Mahomes (Chiefs), Jugador Más Valioso del último Super Bowl y renovado por 500 millones de dólares; Lamar Jackson (Ravens), reinante MVP en la NFL; Russell Wilson (Seahawks), etiquetado como el mejor jugador por Bill Belichick; Dak Prescott (Cowboys), estrella del equipo más popular, y Deshaun Watson (Texans), con un salario base de 39 mdd por los próximos cuatro años.
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También están los de perfil bajo, por ejemplo, Kyrie Murray (Cardinals), aspirante a revolucionar la posición por su corta estatura (1.78 metros) pero con un poderoso y preciso brazo derecho. Además de los veteranos Cam Newton (Patriots) —MVP de 2015— y Tyrod Taylor (Chargers); Teddy Bridgewater (Panthers), y Dwayne Haskins (Washington), en su segundo año.
También hay ocho pasadores suplentes afroamericanos, entre los que destaca Tua Tagovailoa (Dolphins), quien puede tener participación en cualquier momento.