El 10 de julio de 2016, después de recabar las pruebas necesarias, una agente del Ministerio Público solicitó —y le fue concedida—, por primera vez en México, una orden de aprehensión por teléfono

Sólo él puede decir por qué y para qué torturó a Julio César. Sólo él puede explicar por qué el cuerpo del alumno no fue ocultado, como el de los demás, sino expuesto en una calle.