Todos quieren llegar a la silla del águila, por lo que se desatan los rumores ante los últimos acontecimientos políticos.

La lista de aspirantes crece por días y menciones en redes sociales, e incluso en la mañanera del 14 de junio el presidente Andrés Manuel López Obrador añadió a la lista de presidenciables a Tatiana Clouthier Carrillo, Secretaría de Economía; a Juan Ramón de la Fuente, exrector de la UNAM y embajador de México en la ONU; y al propio Esteban Moctezuma, Embajador de México en los Estados Unidos. Las redes sociales mencionaron el martes 15 de junio al Dr. Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera.

Es claro que en la política y en el gobierno, extremar precauciones y confiar en los más leales es una de las normas que más ha distinguido al presidente Andrés Manuel López Obrador. Por ello escogería a uno de sus más leales, como sucede con Claudia Sheinbaum o Juan Ramon de La Fuente, quiénes podrían perfilarse como las mejores opciones por su histórica lealtad, o Santiago Nieto que ha sido fiel y eficaz al Presidente.

Pero a todo esto, habría que repasar la forma de pensar del presidente Andrés Manuel López Obrador y sus postulados con que ha emprendido el liderazgo basado en su tesis de la Cuarta Transformación.

Por eso, la primera pregunta que formularía es: ¿quién de los candidatos lleva en su ADN la Cuarta Transformación?

Bajo esa tesitura, podría abrirse el abanico y aumentar las opciones de los presidenciables de AMLO, porque está en juego su legado político.

El presidente Andrés Manuel López Obrador tiene una intuición política que le ha dado resultados, ahora él como cualquier padre de familia dirá quién será el mejor heredero. Una respuesta es: cualquiera que pueda seguir los postulados de la 4T y con una lealtad a prueba de bala.

Bajo este escenario podrían agregarse además de los mencionados anteriormente, al Consejero Jurídico de la Presidencia, Julio Scherer Ibarra, compañero de varias décadas y el más eficaz operador de AMLO; y Adán Augusto López Hernández, actual gobernador de la tierra del presidente: Tabasco, quien en 2006 fue coordinador de campaña de AMLO correspondiente a la Tercera Circunscripción; de 2007 a 2009 fue diputado local, en 2009 diputado federal y en 2012 fue electo senador de la República. En 2014 anunció su salida del PRD para sumarse a las filas del Movimiento Regeneración Nacional, fue dirigente de ese partido en 2016, y ganó en el 2018 la gubernatura con amplio margen del 61.37 %.

Por ello, quien sea el candidato presidencial en 2024 de AMLO tendrá que llevar en su ADN los postulados de la 4T, para poder enfrentarse y defender el proyecto de nación en las urnas frente a las otras opciones de los diversos partidos políticos o coaliciones que participarán.

Por el momento nos vamos desde la Gran Tenochtitlán a Tabasco, que Tabasco es un Edén.

Abogado y activista, maestro en Ciencias Penales.
@UlrichRichterM