En 2011 cuando nació el movimiento de los indignados en Chile, había figuras muy emblemáticas como Camila Vallejo, y muy cerca le seguía Gabriel Boric. Años después en 2014 ambos juraban como diputados. Sin duda aquel indignado fue puliéndose, haciéndose razonable y conciliador, como aconteció cuando dialogó con los opositores y firmó un acuerdo con todas las fuerzas políticas para convocar una asamblea constituyente para emitir una nueva constitución. Ello le trajo críticas, incluso del Frente Amplio al que regresaría años después para ser candidato presidencial.
El pasado domingo se celebraron las elecciones presidenciales en Chile, donde compitieron Gabriel Boric, representando a la izquierda, y el candidato José Antonio Kast que representó al Frente Social Cristiano que se ubica en el otro extremo político.
El triunfador como sabemos fue el exlíder estudiantil, cuya semblanza nos refiere que del 2014 a la fecha fue diputado por la zona de Punta Arenas. El 18 de julio de 2021 ganó las primarias con un apoyo del 60.42%. Ha sido el candidato presidencial más joven de la historia de Chile, con lo cual se demuestra que la edad no importa sino la capacidad de atraer el respaldo de los ciudadanos.
En una entrevista, Gabriel Boric Font señaló: “Va a ser una elección reñida, por lo tanto, invito a la gente a participar. Depende mucho de ustedes. Eso es la democracia. A usted que está en la casa, usted que tiene dudas, sepa que su participación importa y puede marcar la diferencia.
Confío muchísimo en la sabiduría de los chilenos y chilenas, y también en las instituciones del país. No voy a poner en duda los resultados de hoy. Espero que ambas candidaturas lo hagan. Tenemos que respetar la decisión de los chilenos y chilenas”.
En México la Constitución marca la edad de 35 años cumplidos al tiempo de la elección para poder ser presidente. En Chile se establecen también los 35 años de edad mínima para postularse a la Presidencia del país, por ello Boric es el más joven y, según los resultados, el más votado en la historia de Chile.
El actual y cuestionado presidente Sebastián Piñera felicitó al candidato ganador, con quien tuvo diferencias en los años anteriores, ya que Boric fue uno de los líderes del movimiento estudiantil que se opuso a Piñera.
Uno de los primeros compromisos del futuro presidente chileno es cuidar la democracia todos los días de su gobierno, tras la ríspida contienda presidencial entre dos polos opuestos que representaron los candidatos en las pasadas elecciones.
La diferencia con su contrincante fue de 11 puntos porcentuales aproximadamente Boric 55% y Kast 44%, siendo además el primero en ganar una segunda vuelta. En su primer discurso resaltó cuatro puntos: 1. El saludo en mapuche y el reconocimiento a los pueblos originarios, 2. El poder de las mujeres y de las “disidencias”, 3. El consenso y el realismo: “no queremos desbarrancarnos ni arriesgar lo que cada familia ha luchado con su esfuerzo”, y 4. la nueva constitución es partidaria del trabajo de la convención constituyente que en la segunda mitad de 2022 tendrá un proyecto de Carta Magna.
Como lo señalo en párrafos que anteceden, fue un triunfo épico ya que había quedado en segundo lugar en la primera vuelta del pasado 21 de noviembre.
Señalan analistas que Kast, el candidato perdedor, ofreció las promesas del pasado y no pudo quitarse el fantasma del dictador Pinochet, cuya viuda fallecía como mensaje póstumo al electorado hace unos días. En cambio, Boric se lanzó hacia el futuro conectado con los millennials.
Así que en la política no hay nada escrito, ganó un joven político que dio la voltereta al electorado en los últimos minutos y marca una transición de la clase política en Chile donde los ojos del mundo estarán en los jóvenes que llegarán al gobierno y marcarán un nuevo capítulo en la historia de nuestro país hermano.
