La historia de la izquierda, en México y en el mundo, está ligada a la lucha por la reivindicación de derechos que poco a poco se han convertido en universales. Desde el inicio de nuestra historia como país libre, hasta los tiempos actuales, quienes han formado parte de las filas de la izquierda han encabezado los esfuerzos que dieron paso a las grandes transformaciones. La Independencia, la Reforma, la Revolución y el actual cambio de régimen que estamos emprendiendo son consecuencias de las victorias y derrotas que hombres y mujeres con ideales progresistas conquistaron con el paso de los años.

En la experiencia mexicana, la izquierda ha sido mayoritariamente una fuerza de oposición, perseguida y reprimida, cuyos triunfos democráticos le fueron negados en repetidas ocasiones por el antiguo régimen autoritario; a pesar de ello, logró avanzar en la conquista de mayores libertades para la colectividad. Se podría decir que ser de izquierda es resistir y avanzar. Con resistencia, desde la Independencia hasta la actualidad, logramos avanzar lentamente para dar paso al 2018, cuando la izquierda logró cosechar la semilla de la histórica lucha por el respeto de los derechos y los principios democráticos de nuestro país.

El crecimiento exponencial de Morena, desde su génesis como movimiento democrático, hasta su posicionamiento como el partido más votado en la historia de México, se explica precisamente gracias a las luchas de quienes le antecedieron. Se explica también gracias a su capacidad de convertirse en un catalizador plural de causas sociales que confluyen hacia una idea y consigna básica: la necesidad de un cambio de régimen cuyo efecto general ha sido negativo para la sociedad. Por ello, la izquierda actual en México, ahora desde el gobierno, es responsable de llevar a cabo esa transformación profunda.

Desde 1982 y hasta hace muy poco, existía en México una unión aparentemente indisoluble entre el poder político y el poder económico, producto de las políticas implementadas durante el régimen neoliberal tecnocrático y autoritario. No se trataba de una unión discursiva, sino operativa. Desde el inicio de la época neoliberal en el país, los actores económicos tomaron tal relevancia que fueron capaces de minimizar las funciones del Estado y ganar el favor de las autoridades, las cuales, a su vez, a través de actos de corrupción, pasaron a las filas de la élite económica de nuestra nación.

Si bien inmediatamente después de la Revolución surgió un régimen que antecedió al neoliberal, en el que se centralizó el poder, se creó un partido hegemónico que atentó contra los principios democráticos y se instituyó la figura del presidencialismo metaconstitucional, fue el régimen neoliberal el que abandonó los ideales nacionalistas que Lázaro Cárdenas abanderó en su momento. Bajo las políticas neoliberales, el mercado, y no el Estado, debería ser el encargado de distribuir los recursos, pues sólo aquél podría hacerlo de manera eficiente. En esta lógica, el Estado no tendría por qué intervenir para atender las necesidades de las personas a quienes el mercado ha dejado fuera; la población pobre y marginada estaría entonces condenada a su condición.

La izquierda y, en específico, el proyecto de cambio de régimen que se está viviendo en México se oponen a las ideas neoliberales. Como ya lo ha expresado el presidente Andrés Manuel López Obrador, en este nuevo proyecto de nación lo primero son las personas pobres, los millones de habitantes que por tanto tiempo estuvieron a la deriva durante la larga y triste noche del neoliberalismo. No por ello el cambio de régimen dejará fuera a otros sectores poblacionales, al contrario, la lucha por seguir avanzando requiere que todos resistamos los embates conservadores y reaccionarios de quienes se oponen al cambio social que el país necesita.

Todo esto: la izquierda, el cambio de régimen, la relevancia de Morena y su futuro próximo, la Cuarta Transformación y las resistencias que está enfrentando no pueden ser explicados de manera independiente. Comprenderlos requiere un profundo análisis de su desarrollo a través del tiempo; próximamente publicaré un estudio sobre la historia y las diversas manifestaciones de la izquierda en nuestro país, que fueron la antesala para el nacimiento de Morena como una oposición clara al régimen neoliberal y cuya responsabilidad a futuro, como una de las principales fuerzas de izquierda en el mundo, no debe ser minimizada.

Esta obra será producto de la reflexión sobre la valía histórica de quienes nos antecedieron en la continua lucha de la izquierda, y buscará abordar los retos que ya se vislumbran para lograr el cambio de régimen en nuestro país, así como posibles carreteras de acción para enfrentarlos, pero, sobre todo, espero que esta contribución sirva para recordarnos que la lucha de la izquierda nunca terminará, sino que deberá seguir renovándose, haciendo lo que mejor hace: resistir y avanzar.

ricardomonreala@yahoo.com.mx
Twitter y Facebook: @RicardoMonreal

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