La decisión de programar hasta hoy la discusión y votación en el Pleno del Plan B de la reforma electoral, nos cuentan, se tomó para dar tiempo a obtener respuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre un tema fundamental: el senador Ricardo Monreal “encorchetó” los artículos relacionados con la reorganización administrativa del INE, pues ha advertido que de mantenerse la propuesta que aprobó la Cámara de Diputados, se atentaría contra la autonomía y la operatividad del instituto. Don Ricardo asegura que aún no define el sentido de su voto y se prevé que la de hoy sea una sesión maratónica, con infinidad de reservas de senadores no sólo de oposición, sino de la misma bancada de Morena, pues nos aseguran que varios integrantes de ese grupo parlamentario han expresado su desacuerdo con muchos de los términos de la minuta aprobada en San Lázaro. Hoy se verá si todo queda en fintas o se abren grietas en la fracción morenista.

La lección del caso Mejía para las corcholatas

Nos comentan que quien acudió ayer a Palacio Nacional con el objetivo de hablar con el presidente López Obrador fue el subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía. Nos detallan que a las 17:15 horas llegó al recinto histórico, en donde se encontró con Carlos Torres, coordinador de los programas de Bienestar, a quien le enseñó documentos que parecían ser las encuestas en las que afirma le dan ventaja sobre el senador Armando Guadiana para la candidatura al gobierno de Coahuila por Morena. Luego de varios minutos de espera, los militares que cuidan la puerta lo dejaron entrar. Casi una hora después, salió visiblemente molesto y se negó a dar declaraciones. Nos hacen ver que su caso entraña una lección para todos aquellos que aspiren a alguna candidatura importante del partido guinda, en especial para quienes apuntan a la grande, la presidencial de 2024. Nos recuerdan que desde los tiempos en que era líder del PRD, hubo muchos que se fueron con la finta de tener asegurado el lugar por su cercanía con López Obrador y al final quedaron de lado. Nadie se puede sentir con la candidatura en la bolsa, nos dicen.

Mario y Citlalli se quedan para el 24

Pese a las impugnaciones, Mario Delgado y Citlalli Hernández están a un paso de extender su periodo en los cargos de la presidencia y secretaría general del Comité Ejecutivo Nacional de Morena, respectivamente. Nos hacen ver que la comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos avaló el anteproyecto por el que se validan los cambios a sus documentos básicos, incluyendo el artículo transitorio introducido de último minuto que beneficia a don Mario y doña Citlalli. Esto, para que puedan estar al frente del partido en la contienda de 2024.

Prospectos para la suplencia en Puebla

Tras el fallecimiento del gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, nos adelantan que Ignacio Mier está listo y a la espera de lo que le instruyan desde Palacio Nacional. Nos recuerdan que don Ignacio está apuntado para contender en 2024 pero comentan que, al parecer, aceptaría ser el candidato suplente por lo que resta del periodo que corre. Al mismo tiempo, nos platican, Sergio Gutiérrez Luna se perfila como el sucesor en la coordinación de la bancada si es que a Don Ignacio lo mandan llamar. Otro legislador que estaba ya apuntado para la candidatura es el presidente del Senado, Alejandro Armenta, quien no ha levantado la mano para la suplencia.