Desde que el pasado jueves se votó en el Senado la de gestión del presidente de la Suprema Corte y de los consejeros de la Judicatura Federal, nos dicen, se ha empezado a preparar una posición conjunta. Hasta ahora, nos comentan, el consenso es no opinar hasta en tanto otro Poder, el Legislativo, defina el tema y una vez que lo haga se dará la posición con el mayor consenso posible y de manera institucional. Nos aseguran que, desde el pasado sábado, los consejeros de la Judicatura y los ministros de la Corte han estado en pláticas con el ministro presidente Arturo Zaldívar, evaluando la ampliación del mandato que aprobó la mayoría de Morena, con algunos votos de la oposición. Nos hacen ver que esta semana no habrá posicionamiento, pero sí la entrante.

De disparates y ampliaciones de mandato

Y a propósito del sorpresivo y polémico artículo que amplía por dos años el mandato del presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, nos mencionan que la preocupación del bloque de oposición es que una vez aceptado este tipo de modificaciones exista alguien el Poder Ejecutivo que quiera ampliar el mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador. Aunque el propio presidente ha prometido muchas veces que él se irá a su rancho en Chiapas al terminar sus seis años de gobierno, y que está, los opositores temen que llegado el momento no se hable de una reelección, sino de una ampliación de mandato, en este caso, con el fin de terminar algunas reformas o proyectos de la autollamada Cuarta Transformación. Aunque algunos consideran que este escenario es un disparate, otros señalan que si alguien hubiese dicho la semana pasada que se pretendía ampliar el mandato del presidente de la Corte también se habría calificado como un disparate.

“Alito”, su capital político en riesgo

El dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, Alito, dedicó todo el fin de semana a recorrer Campeche y realizar actos de proselitismo en apoyo a los candidatos del PRI y de la coalición integrada con el PAN y el PRD, tratando de reforzar las campañas en su tierra natal y de la que fue gobernador hasta hace 20 meses, cuando decidió pedir licencia para presidir al partido tricolor. Según encuestas, Morena lleva la delantera para la gubernatura, con Layda Sansores, pero don Alejandro pone toda su esperanza en que la estructura priista que él ayudó a construir apuntale a su sobrino Christian Castro Bello para que se convierta en el nuevo gobernador e impida que el tricolor pierda por primera vez en su historia la . En esta elección, nos hacen ver, “Alito” se juega todo su capital político.

El peligroso show del desafuero

Nos dicen que los consejeros que votaron en contra del registro de las candidaturas de Félix Salgado Macedonio a la y de Raúl Morón no temen al juicio político que Morena promueve en su contra. El argumento de los consejeros, nos comentan, es que ellos simplemente aplicaron la ley y que el propio Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) determinó que sí hubo precampañas y que los candidatos violaron la ley. Adicionalmente, nos señalan, la Sala Superior del TEPJF tiene la facultad de modificar la sanción impuesta por el INE si así lo considera. De este modo, sostienen que el amago de juicio político es parte del show propio de la temporada electoral. Un show muy peligroso, dirían algunos.