Antes que nada, quiero desear un feliz 2022 a toda la gente que lee este espacio, en el que ha habido una constante, pero sincera solicitud de mi parte para que la gente que vive en este país tenga las suficientes precauciones en todo lo referente al coronavirus , y más ahora que se habla de la cuarta ola. He insistido mucho porque en carne propia he sufrido la enfermedad, física y financieramente, la empresa que dirijo ha sufrido, gente muy cercana a mí ha muerto. He insistido mucho, porque el mal que significa no tener precauciones hace más propensa la invasión del virus en muchas personas en el mundo.

Me preocupa mucho que regresemos a ese año en el que inició la pandemia y en el que muchos negocios y muchas personas dejaron de trabajar porque no había forma de hacerlo. Muchas empresas quebradas, restaurantes, gimnasios, comercios. Por eso he insistido en que seamos responsables, ya que si no lo somos vamos a regresar a esa situación y eso solamente sería hundirnos más de lo que estamos.

Me preocupa mucho porque en esta vida debemos tener la precaución de no alentar la desgracia, de buscar a como dé lugar evitar que esto se siga propagando. Me dio tanto gusto escuchar a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México que iba a cancelar el evento de fin de año como precaución, ya que no podemos seguir sin tomar las precauciones que se requieren.

Incluso si tenemos que viajar por cuestión de nuestras diferentes actividades, debemos de tomar todas las medidas y cumplir con todos los requisitos para ir a cualquiera que sea nuestro destino, y regresar con bien. Tal y como lo intenté plasmar en la columna anterior, con la visita que hice a Emiratos Árabes y Qatar por el Campeonato Mundial de Natación, un viaje en que me hizo entender que no hay protocolo exagerado.

No podemos ser tan irresponsables para volver a dejar sin empleo a miles de mexicanos, simplemente por la necedad de no tener un cuidado especial para que no haya la propagación del virus. Ya que no podemos regresar a esos meses negros de 2020 cuando tuvimos que guardarnos todos. A los jóvenes, entiendo el espíritu que hay en ellos, pero el mensaje también es para que se unan al llamado, más ahora que el contagio también hace peligrar a los más pequeños de la casa. Y no olvidemos la cuestión de la vacunación, la tercera dosis y todo lo que haya en relación a esta otra medida.

Ya pasé por un contagio por necedad e irresponsabilidad de hacer un viaje con mis nietos. Por el hecho de estar vacunado no fue tan delicado, pero ahí es cuando entiendes que debes ser cuidadoso para seguir vivo y después, para no dejar sin empleo a mucha gente.

Seamos responsables y esperemos que ahora que tratamos de recuperarnos en lo social y en lo económico seamos más cuidadosos. Recordemos que quienes tienen un mejor futuro son los más disciplinados y eso es lo que debemos apuntar.

Profesor.