En un año tan complicado para todos, hemos encontrado un poco de luz para los nadadores que buscan su lugar en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 . Como lo he comentado en otras columnas, ha sido muy difícil para la delegación de México lograr su participación en el Campeonato Brasileño , pero los resultados han sido buenos. Aún cuando no se han dado esas anheladas marcas A, ha sido muy importante haber tenido un campamento y ahora estar en competencia, algo que no hacían desde marzo.

Todos están muy contentos, algunos han hecho sus mejores marcas; tres hasta ahora, para ser más precisos. Es para reconocerse que ante los riesgos que implica ir a un evento en un país que tiene el segundo lugar en mortalidad por Covid-19 , han mostrado coraje y disciplina, más aún cuando se han pagado sus gastos. Esto demuestra que no fueron de vacaciones. Hasta ahora, no conocen Río , conocen el hotel, la vista hacia el mar y la alberca de competencia. Se han cuidado mucho, y más ahora que uno de los más grandes equipos brasileños, el Pinheiros , quedó fuera de la competencia, luego de que cuatro de sus nadadores dieron positivo.

Me da gusto que los 15 nadadores en Brasil (hay 18 con marca B en total), estén con entusiasmo, ha habido algunas medallas (dos segundos lugares y cuatro terceros puestos, tras dos días de competencias) y se han mejorado cinco tiempos de cuatro nadadores, que no es cosa menor, por lo que hay que reconocer a los tres entrenadores que también pagaron sus gastos; es increíble que de la FMN no volteen ni siquiera a preguntar cómo les está yendo.

Puedes leer:

Entre los nadadores de 100 y 200 metros, el trabajo durante la pandemia, que fue de actividad física fuera del agua o en albercas caseras, no les perjudicó en absoluto, y están nadando cerca de las mejores marcas de su vida, como es el caso de María Matta Cocco y Héctor Ruvalcaba . Entre los de 400 800 y 1,500 metros ha sido más difícil, ya que en el trabajo de un fondista es muy importante el kilometraje permanente en la alberca; sin embargo, están animados, querían saber qué pasaba en su organismo después de dejar de nadar como lo hacían normalmente.

Es importante que la comunidad acuática sepa que no fueron de paseo, sino para conocer su posibilidad de pensar en Olímpicos . La mayoría tiene marca B y quizá algunos tengan la invitación de la FINA , pero lo mejor es buscar la marca A. Lo peor que pueden hacer es dejar de intentarlo, por eso estoy orgulloso de este grupo de mexicanos, que con sus recursos está en Río.

Quiero felicitar también a los padres de familia, que siempre están atentos al rendimiento y en comunicación para apoyar. Lo mismo los entrenadores, los tres que asistieron han hecho un magnífico trabajo, cuidándolos y al pendiente de todo; se trata de Nicolás Torres, Guillermo Cruz y el joven Samuel Acevedo. Vienen más competencias y ojalá estos guerreros cumplan sus metas.

deportes@eluniversal.com.mx

 
Google News

TEMAS RELACIONADOS