El cantante mexicano de música ranchera, José Alfredo Jiménez, ofrece un espectáculo en la llamada Media Torta, en Colombia. Cortesía: Cancillería de la República de Colombia.
Texto: David Antonio Pulido García
Este año se cumplen 50 de la muerte del cantautor mexicano José Alfredo Jiménez , por ello hoy recordamos cuando visitó Colombia los primeros días de septiembre de 1970. En aquella ocasión llegó como invitado principal del Consejo Nacional de Turismo de México, organizador del Gran Festival Gastronómico Mexicano en aquella nación.
El evento arrancó el 10 de septiembre en el salón Monserrate del prestigioso Hotel Tequendama, ubicado en pleno centro de Bogotá y además de la muestra culinaria, presentó una amplia agenda cultural.
Así, las actuaciones del cantante guanajuatense se promocionaron con mayúsculas sostenidas en los principales diarios de la capital colombiana, junto a los nombres del veterano cantante Pedro Vargas y de la entonces joven promesa de la canción ranchera, Alicia Juárez.
Además de su carrera como cantante, Alicia Juárez también destacó por su papel en películas como "Juan Armenta, el repatriado” (1976) y “La mafia de la frontera” (1979). Cortesía: Cancillería de la República de Colombia.
Uno de los primeros medios impresos de Colombia en hablar con José Alfredo fue el diario El Tiempo. En dicha entrevista, además de invitar a la ciudadanía a participar del evento, Jiménez se refirió al difícil momento por el que atravesaba el cine mexicano en postrimerías de los años 60.
Para la época en que se realizó este concierto, ya se consideraba a José Alfredo como “el mayor exponente de rancheras”. ESPECIAL.
Elogió ampliamente a sus compañeros de cartel y hasta le sobró tiempo para dar su opinión -nada favorable, por cierto- sobre los hippies mexicanos. Sin embargo, pese a lo amable de la entrevista y al entusiasta “¡viva Colombia!” que le puso fin, una nota de nostalgia se le escapó cuando admitió que le sería difícil pasar por primera vez las fiestas de independencia fuera de su querido país.
Según lo demuestra la prensa bogotana de la época, el festival fue todo un éxito. Lo que originalmente se había planeado para un par de semanas, terminó extendiéndose hasta el 3 de octubre.
En el programa de la muestra gastronómica también participaron Pedro Vargas y Carmenza Duque. Hemeroteca EL UNIVERSAL.
Del mismo modo, las presentaciones de los artistas mexicanos, cuyos recitales se habían planeado como espectáculos privados para los asistentes, desbordaron la capacidad de espectadores, a tal punto que fue necesario realizar un gran concierto en la Plaza de Toros de Santamaría el 27 de septiembre, con precios que oscilaban entre los $10 y $40 pesos colombianos, una tarifa bastante accesible si se recuerda que el salario mínimo para 1970 en Colombia era de $519 mensuales.
El pasado mes de diciembre 2022, bajo el nombre de Plaza Cultural Santamaría, este recinto albergó una muestra de emprendimientos culturales. Tomado de bogota.gov.co.
Aquel domingo las entradas se agotaron, no así el furor y la admiración por la música del intérprete mexicano quien, gracias a una ley de la alcaldía de Bogotá que ordenaba a todos los artistas presentarse en la ciudad a ofrecer un concierto gratuito en un escenario al aire libre conocido como “La Media Torta”, ahí José Alfredo volvió a estremecer al público de la capital colombiana con las notas de “Te solté la rienda”, interpretación que en palabras del mismo autor estrenó por primera vez en Bogotá.
El lleno fue total como se puede ver en las fotografías de aquel día. Hombres, mujeres y niños de origen humilde corearon una a una sus canciones hasta bien entrada la tarde, cuando entre vítores, aplausos y muestras de cariño José Alfredo tuvo que decir adiós.
Sin duda fue un mes cargado de emociones encontradas para José Alfredo y sus compañeros de viaje. La nostalgia de pasar las fiestas patrias lejos de México debió contrastar enormemente con las muestras de admiración y las atenciones brindadas del público colombiano.
Alicia fue la última esposa de José Alfredo, hasta la muerte del guanajuatense en 1973. Cortesía: Cancillería de la República de Colombia.
Fue tal la magnitud de la experiencia que el 3 de octubre de 1970, justo antes de partir rumbo a México, José Alfredo Jiménez tomó la parte trasera de un menú del Hotel Tequendama y allí, de su puño y letra, dejó plasmada la letra de una canción dedicada a Colombia, quizá la única que compuso para un país que no fuera su México.
La canción dice así:
Colombia, Colombia, Colombia,
me voy a llevar tu cariño,
lo quiero prendido en el alma
como aquel juguete que tuve de niño
Me quiero llevar para siempre
tu cielo, tu sol, tu aprecio,
un pueblo colgado en mi cuello
como una esmeralda que no tenga precio
Que triste tener que dejarte
no sé si podré regresar
yo no soy el dueño de esta vida mía
déjame que vuelva “Sr. Monserrat”
Documento original donde está escrita la canción a Colombia por el puño y letra de Jiménez, que data del octubre 3 de 1970. Cortesía: Cancillería de la República de Colombia.
Más allá del sentimiento que expresa, en la canción hay dos referencias muy importantes para la cultura colombiana de entonces: la primera es la esmeralda que, según dicen los expertos, en Colombia se extrae con un grado altísimo de calidad y belleza, lo que la posiciona como una de las mejores del mundo.
La segunda referencia, mucho más espiritual, es la mención al señor caído de Monserrate: una estatua de Cristo tendido con la cruz a cuestas que data del siglo XVII, la cual es venerada como milagrosa y todavía se encuentra resguardada en el templo que corona el cerro más importante de la capital colombiana, conocido como Monserrate.
Dado que se encuentra en la cima de uno de los cerros más importantes de Bogotá, el acceso más común a este templo es un camino ascendente de 2.5 kilómetros. Cortesía: Sandra Delgado Cajiao.
Es una lástima no haber encontrado algún asistente a los conciertos de esos días que nos pudiese hablar al respecto, el recuerdo llega hasta nosotros por la prensa, tres fotografías originales y el menú donde quedó plasmada la canción a Colombia, documentos que hoy en día reposan en el archivo de la Cancillería de la República de Colombia, los cuales fueron donados a esta institución por José Alfredo Jiménez Medel, en octubre de 2019.