En la década de los años 30, el creciente poderío armamentista de los regímenes fascistas en Europa fue la antesala de la Segunda Guerra Mundial. Con ese escenario el presidente de México Gral. Lázaro Cárdenas tomó el control de la industria petrolera, materia prima estratégica para los años de guerra y para el desarrollo económico del futuro de México.

Mucho se ha debatido en relación a la reciente iniciativa de reformas al sector eléctrico, y poca atención ha merecido la decisión de definir al litio como un mineral estratégico cuyas funciones son exclusivas del Estado mexicano en las facultades que otorga en los artículos 27 y 28 de la Constitución.

El litio es la materia prima fundamental de la elaboración de baterías para la electromovilidad, así como múltiples aplicaciones en la industria y en la vida diaria. A su vez, las potencias militares mantienen en secreto sus aplicaciones.

El presidente Andrés Manuel López Obrador declaró: “No se va a poder desarrollar la industria tecnológica y la industria moderna sin el litio y se sabe que México tiene suficiente litio y esto nos permite, sobre todo pensando en las nuevas generaciones, dejar a los mexicanos este recurso para el desarrollo de México. Por eso tomamos esta decisión de que el litio sea de la nación, de todos los mexicanos”.

Bolivia, Chile y Argentina tienen yacimientos de litio de importancia mundial, y empresas de Canadá, Estados Unidos, Corea del Sur, China, Italia, Japón y Australia están realizando la extracción en esas regiones. Muchas de estas empresas crearon en Londres una asociación internacional, como instancia que les permita negociar con las empresas manufactureras a nivel global. Argentina, por su parte, busca dar al gobierno el control de la extracción por empresa propiedad del Estado encargada de la explotación exclusiva de este insumo.

De igual manera, es pertinente que los países con yacimientos de consideración se asocien en una organización internacional que permita regular la extracción, producción para la explotación racional de este insumo no renovable, así como su precio. Hoy, el litio es un mercado de demanda y las ventajas que brinda el poder definir la oferta nos sitúa en el lado más rentable de este nuevo mercado, pues se estima que para el año 2030 la demanda sea de 1.7 millones de toneladas.

En una visión de largo plazo es evidente que México ya superó la etapa de cuando nuestra economía era dependiente de la exportación de materias primas. Por ello es oportuno diseñar la estructura de una cadena productiva de alto valor agregado, que pueda desarrollar el sector industrial para la creación de empleos con un dividendo social de largo plazo.

Ahora es el momento oportuno para analizar públicamente las mejores opciones en este nuevo mercado, mediante foros y sesiones donde las respectivas comisiones legislativas convoquen a especialistas, organizaciones productivas y grupos de interés a aportar sus mejores ideas para el desarrollo futuro de esta importante industria.

Es importante recordar que por mucha capacidad y durabilidad que tengan, todas las baterías se cargan con electricidad.

Rúbrica. Medalla Belisario Domínguez 2021. Mi más afectuosa felicitación a mi estimada Ifigenia Martínez, por el reconocimiento con el máximo galardón con que México reconoce a personalidades eminentes por una vida de entrega a las convicciones que ella ha debatido siempre con inteligencia y dignidad.

Político y escritor. @AlemanVelascoM articulo@alemanvelasco.org