Las dimensiones que alcanzó el sábado pasado la trifulca en el estadio La Corregidora de Querétaro son tan extrañas y sospechosas como el esquema de propiedad que mantenía el equipo de Gallos Blancos, y como el que tendrá que construir una vez más en los próximos meses para cumplir con las sanciones que le impuso la Federación Mexicana de Futbol y La Liga MX.

En este espacio relatamos hace un más de un año los malabares que debió realizar el presidente de este equipo, Gabriel Solares Jove , para convencer a la Liga, encabezada en ese entonces por Enrique Bonilla , de que en realidad era un empresario con los tamaños para invertir 30 millones de dólares en una franquicia deportiva, y de que tenía la experiencia para dirigir el club.

Las sospechas sobre la inexperiencia de Solares Jove se basaron en que el grueso de su trayectoria profesional se limitaba a labores de contaduría pública en el grupo de Hospitales Amerimed, propiedad principalmente del Consejero Independiente de Pemex y senador federal de Morena, Rafael Espino de la Peña .

Según información a la que tuvo acceso esta columna, Espino era en realidad el propietario del proyecto Gallos Blancos que arrancó en este sexenio, y quien envió como figura principal de la directiva a uno de sus colaboradores, a quien intentó curtir dentro del fútbol profesional cuando compró al club Atlante de la Liga de Expansión.

En su momento, Solares Jove negó a esta columna cualquier tipo de relación laboral con el senador morenista, y aseguró haber tenido relación previa con la Femexfut, organismo al que le prestaba asesoría financiera. Según sus dichos, los vínculos con “Rafa” se limitaban a una amistad, iniciada en los tiempos en que invirtieron conjuntamente en el cuadro de Los Potros.

Respecto al origen de los millonarios fondos para invertir en el equipo, Gabriel Solares aseguró que la compra se pactó con Grupo Caliente en un esquema de pagos a siete años. La operación se concretó en junio de 2020, por lo que la franquicia seguiría siendo propiedad del corporativo de Jorgealberto Hank hasta mediados de 2027.

En este contexto se entiende de mejor forma la razón por la que la Liga MX, que hoy preside Mikel Arriola , depositó nuevamente en la familia Hank la administración del equipo representativo de Querétaro; en otras palabras simplemente oficializó a quien, de acuerdo con los tiempos de las transacciones, seguía siendo su dueño original.

Al mismo tiempo, toma sentido que en el Bajío y Norte del país empiece a correr el rumor de que el empresario interesado en adquirir al club Gallos Blancos sea nuevamente –ahora de manera abierta– el chihuahuense Rafael Espino, ni más ni menos que el inversionista principal del proyecto que pulverizó el prestigio del futbol mexicano a nivel internacional.

Gabriel Solares y el exportero de la selección mexicana, Adolfo Ríos , estarán suspendidos durante cinco años de todo tipo de actividad relacionada con el fútbol profesional, mientras el nuevo presidente de la Comisión de Justicia en el Senado parece que prepara una nueva historia para mantener el control del equipo.

En la asamblea de dueños de este martes se decidió que el equipo deberá venderse a un nuevo dueño en un periodo máximo de un año.

Posdata

Sobre la tragedia del sábado pasado han circulado en las redes sociales todo tipo de teorías de la conspiración sobre la violencia extrema desatada en el Gallos Blancos contra Atlas, algunas versiones apuntan a la participación del crimen organizado y otras tantas señalan una cortina de humo enviada por Morena.

SAT contra El Bronco y sus cercanos

Ayer se dio a conocer que la Subsecretaría de Administración Tributaria (SAT) del gobierno de Nuevo León congeló las cuentas de dos empresas y ex funcionarios de la administración de Jaime Rodríguez Calderón , conocido como “El Bronco”, luego de dar seguimiento a transferencias interbancarias y operaciones con proveedoras del estado que están siendo investigadas por el gobierno de Samuel García . Los desvíos y malversaciones que encontró el nuevo gobernador suman miles de millones de pesos. El Bronco podría acabar como varios gobernadores priistas de la llamada nueva generación que proclamó el expresidente Enrique Peña Nieto: en la cárcel y sin nadie que meta las manos por ellos.

@MarioMal
mario.maldonado.padilla@gmail.com