El día 15 de octubre de 2020 transcurría con “normalidad” , todos concentrados en la pandemia, en los casos y las defunciones por COVID-19, los medicamentos contra el cáncer que fueron robados, y otras muchas cosas más que aquejan a nuestro País. Pero el Gobierno de los Estados Unidos nos tenía algo preparado, algo que quizá no se veía venir pero que dejó de lado todos los temas que día a día desde inició del presente año veníamos tratando.

La noche de ese día, el Canciller mexicano Marcelo Ebrard informaba a través de cuenta oficial de twitter, la detención del Gral. Salvador Cienfuegos Zepeda, Ex Secretario de la Defensa de nuestro País, en Los Ángeles, California, a petición de la Drug Enfocemente Administration (DEA) por su presunta participación en delitos de “Conspiración, Narcotráfico y Lavado de Dinero” .

Sí, Salvador Cienfuegos Zepeda, el hombre encargado de “Defender la integridad, independencia y soberanía de la nación” durante el periodo de Enrique Peña Nieto, se encuentra bajo custodia del gobierno norteamericano por delitos de los cuales, en México, era el encargado principal de combatir.

Salvador, que por más de 50 años “sirvió” a la patria en diversos cargos de trascendencia dentro de la misma SEDENA, hoy es presuntamente relacionado con actividades ilícitas, que de acuerdo al Gobierno de Los Estados Unidos, el ex Secretario, colabora de distintas maneras con Juan Francisco Patrón Sánchez, conocido como el “H2, líder del cártel de los “Beltrán Leyva”, quien dominaba las actividades delictivas que se desarrollaban en Nayarit y el sur de Sinaloa.

Lo anterior deja entrever que la corrupción se encuentra en las entrañas de un País que se consume asimismo desde su interior, y que sin duda, destruye la honorabilidad de una institución tan importante como lo es la Secretaría de la Defensa Nacional . Entonces nos podemos preguntar ¿Qué papel jugaba la SEDENA en la pasada administración? ¿A caso estaba convertida en otro cártel mexicano? ¿Era líder delincuencial en nuestro País? ¿Era la SEDENA el cuerpo armado de un capo mexicano más? Y como País ¡Qué haremos para identificar a sus cómplices? Porque resulta evidente que Salvador no actuaba solo.

Sin duda, la detención de ex secretario es una exigencia al Gobierno Mexicano de investigar a fondo este tipo de actividades ilícitas que sucedía y que muy probablemente siguen sucediendo y que a su vez, manchan de manera terrible la imagen, pero sobre todo, devastan la credibilidad de nuestras instituciones de Seguridad Nacional .

Ahora, quienes encontraban en el País vecino un lugar de retiro de la vida pública, deben de estar buscando un nuevo destino que le permita vivir tranquilos y en paz, y no suceda como recientemente a Don Genaro o Don Salvador, que son muestra evidente de que “lo que hacen en nuestro país, se paga en los Estados Unidos” ante la incapacidad de los responsables de la impartición de justicia en México.

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