El arranque del segundo semestre del 2021 no ha sido del todo sencillo, pues a contracorriente a como sucede en otras latitudes del orbe, México continúa sumergiéndose en una crisis sanitaria y económica. Y si bien es cierto que ya no se han apreciado los mismos impactos de defunciones y parálisis en las actividades de hace unos meses, también lo es que se han hecho latentes las adversidades que enfrentan decenas de miles de mexicanos día a día con más contagios y las millones de familias a las que sigue sin alcanzarle su sueldo para adquirir la canasta básica.

El arranque del segundo semestre del 2021 no ha sido del todo sencillo, pues a contracorriente a como sucede en otras latitudes del orbe, México continúa sumergiéndose en una crisis sanitaria y económica. Y si bien es cierto que ya no se han apreciado los mismos impactos de defunciones y parálisis en las actividades de hace unos meses, también lo es que se han hecho latentes las adversidades que enfrentan decenas de miles de mexicanos día a día con más contagios y las millones de familias a las que sigue sin alcanzarle su sueldo para adquirir la canasta básica.

A la par de esta problemática, se observa que cuando se vislumbraba un escenario de despegue en diversos sectores productivos, se han encontrado con severas limitantes como lo son la tercera ola de contagios que nos ha obligado a detener la movilidad, así como al poco apoyo brindado por la administración pública federal. La primera medida si bien ayuda a prevenir más casos de contagios, también ha demostrado afectar de manera profunda a la economía de los sectores comerciales e industriales, principalmente los de servicios como es el turismo.

El turismo, en tiempos de la 4T se ha alejado por completo del verdadero potencial con el que cuenta nuestro país, pasando por alto la oportunidad de poner en marcha un plan estratégico y especializado que encamine a nuestro país en la ruta correcta para la reactivación de sectores que tan importante papel desempeñan en el crecimiento económico y el desarrollo social.

Sin embargo, se ha optado por medidas regresivas, como la que tomó Caminos y Puentes Federales de Ingresos y Servicios Conexos (CAPUFE) el 3 de febrero de 2021, que poco alienta transitar hacia un impulso turístico, pues el aumento en el peaje de toda la red de autopistas que administra, incluyendo la del Sol (dirección a Acapulco), representa una merma directa al desarrollo de la denominada industria sin chimeneas.

Esta situación, culmina en permear una cadena de afectaciones económicas para el sector turístico en la actualidad, toda vez que regiones como el Estado de Guerrero —donde el 76% del Producto Interno Bruto del Estado corresponde a las actividades económicas terciarias—, no logran salir integralmente de la crisis aún con la víspera de arribo de capitales.

Asimismo, de acuerdo con un estudio presentado por el Centro de Investigación y Competitividad Turística Anáhuac, la llegada de turistas internacionales este año se prevé sea de alrededor de 27 millones de viajeros, una cifra que sería un 40% inferior a los niveles de 2019; mientras que respecto al turismo nacional, la demanda se espera sea de 33.5 millones de visitantes, que representaría una caída de 46.2% respecto a 2019.

No obstante, este escenario es de enorme incertidumbre, y dada la experiencia de 2020, podría disminuirse considerablemente, dejando un panorama más certero a que desde una perspectiva optimista, el sector turístico pudiera recuperar los números previos al Covid-19 hasta el año 2023.

Dicho lo anterior, es urgente que las autoridades pongan en marcha un plan integral y visionario que sume a la sociedad y la iniciativa privada en favor de un solo fin, revitalizar la economía nacional con una derrama de beneficios para todos. Además, sería de gran relevancia que durante el periodo vacacional de julio, se avalen incentivos turísticos, como lo es descuento en las tarifas de peajes.

Para ello, es imprescindible acompañar cualquier estrategia con el hecho de no permitir que la pandemia continúe creciendo, pues hoy más que nunca las y los mexicanos debemos apegarnos a un estricto criterio de responsabilidad para tomar las medidas sanitarias necesarias que contengan la dispersión de este virus y alcanzar el desarrollo que todos esperamos. 

Senador de la República.
@manuelanorve