Nos platican que en Tabasco se confirmó aquello de que “mi palabra es la ley” del presidente Andrés Manuel López Obrador, pues ninguno de sus familiares estará en las boletas electorales. Nos relatan que Morena dio a conocer la lista de candidatos al Senado y en primera fórmula aparece Rosalinda López Hernández (Morena), hermana de don Adán Augusto López y esposa del gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón Cadenas (Morena), y en segunda fórmula Óscar Cantón Zetina (Morena), la cual pretendía José Ramiro López Obrador, pero al parecer fue vetado por su propio carnal. A ver si como dicen, “el que parte y comparte, se queda con la mejor parte. Aún así, “todo queda en familia”.
Las prioridades en Oaxaca
Desde Oaxaca nos comentan que quien anduvo muy preocupado este fin de semana fue Jesús Romero López (Morena), secretario de Gobierno estatal, pues pese a sus promesas para apoyar a los migrantes, dos municipios morenistas se negaron a recibir y dar ayuda humanitaria a la caravana que recorre la tierra del mezcal. El detalle, nos hacen ver, es que su apuro en realidad era que los extranjeros hicieran “un escándalo”, por lo que optó por el control de daños. Eso sí, don Jesús se dio tiempo para ir a columpiarse a una playa y echarle flores a Yessenia Nolasco, su excolaboradora y aspirante de Morena a edil de Salina Cruz. ¡Prioridades!
El candidato que nomás no cumple
El que está “colmando de piedritas” a sus gobernados en Yucatán, nos comentan es el alcalde de Motul, Roger Aguilar Arroyo (Morena) buscando su reelección, pues eligió la foto de su hija menor de edad para promover su municipio como Pueblo Mágico, lo que le generó críticas. Nos recuerdan que don Rogelio es de origen priista y se ha caracterizado por la polémica fácil, pues apenas hace unos días llamó héroe nacional al presidente Andrés Manuel López Obrador, además de que ordenó pintar de guinda todos los edificios públicos. Sin embargo, nos dicen que es “pura baba de perico”, pues hace dos años anunció el museo de la diversidad sexual, del que no se ha colocado ni una piedra. ¿Cuándo llegará la gota que derrame el vaso?

