De acuerdo al presidente López Obrador la motivación de las persistentes críticas y observaciones vertidas por la oposición obedecen a los tiempos electorales que atravesamos. De ser así, aplicando una lógica similar, las habituales referencias del Ejecutivo hacia el conservadurismo, sinónimo de hipocresía, corrupción, racismo, clasismo y humillación al pueblo, podrían igualmente relacionarse al actual momento electoral, con el reparo de que dichas expresiones son interpretadas como promoción en favor de la visión partidista que él mismo representa. Al respecto, AMLO insistentemente se refiere al robo cometido en su agravio de las elecciones de 2006, como si se tratara de un hecho irrebatible, sin dejar lugar a dudas ni interpretaciones distintas. De ser así, habría que corregir el resultado oficial de dicha elección federal que le concedió el triunfo a Felipe Calderón.
Las próximas elecciones de junio 2021, con casi 95 millones de potenciales electores, serán las más grandes de nuestra historia, con la renovación de 21 mil cargos de elección popular, incluyendo 500 diputados federales y 15 gobernadores. Llama la atención la posición que asumirá el Instituto Nacional Electoral al obligar a los distintos partidos a que 8 de las 15 candidaturas a gubernaturas sean para mujeres. Al respecto consideremos que, en todo caso, no le corresponde al INE sino al poder legislativo la atribución de fijar reglas de género y en cuanto a decidir a priori la representación de mujeres en las candidaturas, éstas deben supeditarse a la capacidad de cada aspirante, independiente a su sexo. Si la mayoría de candidatos resultan ser mujeres capaces, qué bien, pero que no sean nominadas para cumplir con un turno de género.
PRI, PAN y PRD, conscientes del liderazgo de Morena, optaron por ser pragmáticos, relegando principios y convicciones individuales en aras de alcanzar una mayor representatividad popular y juntos alcanzar la mayoría numérica en la Cámara de Diputados, anunciando así su incorporación al recién creado frente “Sí por México”, plataforma integrada por 500 organizaciones opuestas al gobierno de la 4T, compartiendo la intención de fortalecer la democracia en el país, combatir la pobreza, mejorar la educación y la salud, luchar contra la violencia machista y defender el medio ambiente. Dicha agrupación, conformada por varios organismos conservadores, es encabezada entre otros, por el exdirigente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos, el activista Claudio González y la periodista priista Beatriz Pagés. Al momento no se ha precisado el alcance aspiracional de la referida alianza, pero obviamente intentarán presentar candidaturas comunes de sobresalientes ciudadanos de distintos ámbitos. El objetivo del llamado TUCOM – Todos Unidos Contra Morena- es minar la popularidad del Presidente y de su partido. Ver para creer. Nunca hay que decir nunca. PRI, PAN y PRD juntos, lo importante es ganar. Principios? tienen muchos.
Los líderes de los tres referidos partidos han sumado su inconformidad a la del copioso grupo de comentócratas que difieren de la postura del gobierno mexicano en cuanto a no reconocer a Joe Biden como vencedor de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Esta papista postura del gobierno mexicano envuelta en el manto de la autodeterminación y la no intervención es llevada a extremos; finalmente habrá de aceptarse lo inminente, quedándonos para entonces atrás en la fila de “amigous” del nuevo inquilino de la Casa Blanca.
De acuerdo con el Presidente: Son tiempos electorales.
