En el encierro nos enfrentamos a aquel de quien más quisiéramos huir: de nosotros mismos.

***

No levantarnos de la cama por depresión es como si la muerte nos besara.

***

Somos actores improvisados —que no siempre saben sus líneas— en el teatro de los sueños.

***

¿Y si esta existencia no fuera sino el doloroso, oscuro, nacimiento para atracar en un nuevo puerto?

***

Hay momentos en que debemos disponer de todas las fuerzas que tengamos —físicas y mentales— para transformarlas en un acto concreto.

Google News

TEMAS RELACIONADOS