La muerte de Diego Armando Maradona

paralizó al mundo deportivo; mas que paralizarlo, lo colapsó, pero -sin duda- era una desenlace que todos esperábamos tarde o temprano. Diego jugó con la muerte durante los últimos 20 años, se volvió un inmortal, fue y vino de la muerte; siempre gambeteó con las crisis físicas, pero llegó el minuto 90 y tuvo que irse.

Pero su muerte traerá muchas consecuencias, sobre todo disputas familiares y económicas para su entorno más cercano. Me gustaría compartirles algunos datos sobre la marca Maradona, la cual hoy -sin duda- se ha vuelto inmortal y en su momento era incalculable, tanto en el aspecto económico como en el deportivo.

Algunos datos de cuánto cobraba Maradona: En 1984, jugando para el Napoli, firmó un contrato valuado en 5.3 millones de dólares; de esta forma, cobró un salario basado en tres conceptos: 800 mil dólares de prima, 1 millón por publicidad y 400 mil por partido amistoso.

Cuando el "Pelusa" trabajó en la televisión argentina, cobró 50 mil dólares por programa, además de ganar miles de dólares por los anuncios del show. Ese año, Diego cobraba entre 80 y 90 mil dólares por entrevista, su participación en algún partido amistoso costaba mínimo 200 mil. Siendo comentarista en Copa del Mundo, cobraba alrededor de medio millón de dólares, cantidad muy redituable para el contratista.

En 2003, e l "Pelusa" también lanzó una marca de vino con su nombre, reportando 20 mil dólares mensuales y los casinos también entraron al juego con máquinas tragamonedas, dejándole una renta de 50 mil dólares. Incluso, hasta antes de morir, Diego seguía recibiendo ingresos por conceptos de videojuegos, escuelas de futbol que llevan su nombre en varios países, así como inversiones en Cuba, Argentina e Italia.

Hoy se verán algunas reacciones en el mercado de ventas online o subastas por artículos de Maradona. Por ejemplo, se pueden encontrar una playera de la selección de Argentina, firmada por él, en 6.5 millones de pesos, así como otras de Boca Juniors en 3.5 y 2 mdp.

Otra disputa será la propiedad de la marca Maradona, pero los datos son claros. Tiene 63 registros y varios de esos pertenecen a la empresa Sattvica S.A. El propietario es Matías Edgardo Morla, el último abogado del Diego. Además, su vicepresidente es Christian Pomargo, una de las personas que estaba en la casa cuando Maradona falleció. Sin duda, este tema dará mucho de qué hablar.

Falta espacio para seguir enumerando los negocios y el marketing que generaba el "D10S" pero su legado en los negocios deportivos quedará plasmado para toda la historia.

@huuseinforzan

 
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