La llegada de Hirving Lozano al Napoli ha causado verdadero furor entre los aficionados de este equipo, que quiere, con base en este tipo de contrataciones (se habla de que podría fichar al delantero argentino Mauro Icardi), competirle a la Juventus en busca del campeonato de la Serie A.

Hasta cierto punto, pareciera exagerada la reacción de los fanáticos de este equipo, que ven al atacante mexicano como el gran salvador o aquel que pudiera llevarlos a conseguir hasta una Champions League.

Y por supuesto que el seleccionado nacional tiene la calidad para tener una buena carrera en Italia, siempre y cuando se mantenga concentrado, como lo ha hecho hasta ahora, porque el trato que le darán en Nápoles será de una verdadera estrella, algo que probablemente había vivido en Eindhoven, con el PSV , pero no a los niveles que por ahora se ha visto en Italia.

Resulta entendible que lo vean como un salvador cuando el equipo hizo la mayor inversión en un futbolista de su historia, al pagar cerca de 46 millones de dólares (según los reportes), además de la fijación que ha manifestado el técnico Carlo Ancelotti , quien desde que lo observó con la Selección Nacional cuando comentó para Televisa en el Mundial de Rusia 2018, comenzó a mover sus tentáculos hasta conseguir que la directiva napolitana lo contratara.

Con esto vendrá, claro, mayor responsabilidad para Lozano , lo cual debe entender perfectamente bien para no ser un jugador mexicano más, que solamente pasó por la Serie A sin pena ni gloria.

Algo muy similar a lo que sucedió con Raúl Jiménez en el Wolverhampton, que pagó 40 millones de dólares al Benfica para quedarse con el delantero, quien ha respondido con buenas actuaciones y goles.

Lozano es el primer mexicano, atacante, que jugará en el balompié italiano. En el recuento de los futbolistas de nuestro país que han fichado por clubes del calcio (Pedro Pineda no jugó cuando estuvo a prueba con el Milan), todos han sido defensores y ninguno cumplió con las altas expectativas que se generaron a su llegada.

Desde Miguel Layún

y los pocos minutos que tuvo con el Atalanta, hasta los casi dos años que Rafael Márquez jugó para el Hellas Verona, sin olvidar los 317 minutos de Héctor Moreno con la Roma o los grandiosos 20 partidos que Carlos Salcedo disputó con la Fiorentina.

Ninguno de estos cuatro futbolistas llegó a Italia con lo que ha generado Lozano al momento, ni siquiera Márquez con todo y su trayectoria.

Hirving ya es un fenómeno en el futbol italiano
y responder a eso es un enorme reto para que el que debe estar preparado física, mental y futbolísticamente, ya que no solamente será la pelea por el Scudetto y la Copa de Italia, sino que el Nápoli disputará la Champions League y ahí también vendrá la exigencia para su refuerzo más caro en la historia.

@gvlo2008

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