Desterrar la violencia y las desigualdades hacia las mujeres es un proceso que debemos construir todos en sociedad. Los datos nos demuestran que no es nada alentadora esta situación. Por ejemplo, Naciones Unidas estima que a nivel mundial, 1 de cada 3 mujeres ha sufrido algún tipo de violencia. De acuerdo con el Inegi, existen diferentes tipos de violencia: la física, psicológica, sexual, económica y patrimonial. Además, estas violencias se presentan en diferentes ámbitos como: el familiar, comunitario, laboral, escolar, digital y en las relaciones de pareja.

Estas violencias son el producto de estructuras patriarcales de desigualdad que han sido moldeadas por instituciones, leyes, normas, creencias religiosas y sistemas político, económico y cultural por la concepción históricamente arraigada, de que las mujeres deben ser subordinadas a los hombres. Por ejemplo, los roles de género que son impuestos desde la infancia, marcan un hito de pensamiento que en la mayoría de las veces predispone su futuro. Estos roles inculcan en la sociedad, modelos que suelen encuadrar a las mujeres a ser educadas para cuidar, servir, callar, y complacer, y a los hombres, para mandar, decidir, controlar, dominar. Se reproducen en la familia, la escuela, los medios, las iglesias y el trabajo.

Estos roles también suelen incidir en lo que las mujeres deben estudiar, dónde trabajar o a qué dedicarse además del control económico que se ejerce sobre ellas, pueden llegar a ser el caldo de cultivo de las violencias. ¿Dónde pasa esto? En los espacios públicos o privados, en sus casas o en sus centros de trabajo. Pero, ¿cómo pueden defenderse, si carecen de los recursos económicos, materiales o de un acompañamiento que las asesore frente a sus agresores, además, de padecer aún un sistema de justicia regularmente ciego frente a estas desigualdades y violencias?

Como una respuesta directa a esta grave problemática, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo junto con la secretaria de las Mujeres, Citlalli Hernández Mora, presentaron el pasado viernes la Red Nacional de Abogadas de las Mujeres, una iniciativa trascendental que busca ofrecer asesoría jurídica gratuita y accesible a mujeres en todo el país. Esta Red es un esfuerzo coordinado para combatir la violencia de género y garantizar el acceso a la justicia para las mujeres mexicanas.

Conformada inicialmente por 838 abogadas profesionales, la Red Nacional de Abogadas de las Mujeres brindará asesoría jurídica gratuita en una amplia gama de casos como la violencia familiar, sexual, laboral, económica y política. Su labor abarcará desde la orientación inicial hasta el acompañamiento en los procesos legales, asegurando que las mujeres cuenten con el respaldo necesario en cada etapa, en especial, las mujeres y niñas indígenas, que son las más vulnerables. Al respecto, ya está disponible el número 079, opción 1, como un canal directo y confidencial para denunciar casos de violencia.

La Red Nacional de Abogadas de las Mujeres aspira a la construcción de un México donde todas las mujeres puedan vivir libres de miedo, con una defensa legal digna y gratuita, por tanto, ¡ya no estarán solas!

Lo dijo la Presidenta de México: ¡No llega sola, llegamos todas!

Consejera jurídica de la Presidencia

Únete a nuestro canal ¡EL UNIVERSAL ya está en Whatsapp!, desde tu dispositivo móvil entérate de las noticias más relevantes del día, artículos de opinión, entretenimiento, tendencias y más.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Comentarios