"El que no sabe gozar de la aventura cuando le viene,
no se debe quejar si se le pasa".
- Miguel de Cervantes -
Antes de retornar a El Parador de Almagro, donde nos quedamos en la entrega anterior; queridas amigas, apreciados amigos, distinguidas lectoras e insignes lectores, tomaremos un breve atajo.
El ilusionado ánimo es ponderar una real obra de arte, que mi amada esposa GEMY y el que teclea, acabamos de disfrutar en pleno corazón de Madrid, titulada extraordinariamente como "El Cautivo".
La cinta retrata una etapa realmente magnífica, situada en 1575, de la fantástica vida del místico autor español que engalana nuestro epígrafe.
Enfatizando que no se la deben perder, más allá de acomplejadas e irreverentes controversias, es incomparable francamente, la recomendación es absoluta, total e inevitable, seguramente la disfrutarán sin la menor duda, es algo sencillamente sublime en todos los sentidos posibles.
Regresando al fosforescente Parador de Almagro donde arribamos más enamorados que nunca - si se puede - en nuestro aniversario número XXXIX, celebrando los primeros 39 meses del inicio de nuestro idilio, desde aquel mágico 25 de mayo del año 2022, cuando se gestó el eterno romance, en la Plaza de Toros bautizada como "LAS VENTAS", instalada en la legendaria calle de Alcalá de la capital española.
El portentoso hotel ubicado en la calle de Ronda San Francisco número 31, en el casco antiguo de Ciudad Real, a escasos 25 minutos de Madrid en el AVE ferroviario con un costo de menos de 15 euros (unos 350 pesos, moneda nacional) donde el trayecto es muy puntual - tardamos quizá - como ya les compartimos previamente, un poco más para llegar caminando a las instalaciones, sin dejar de lado que de reojo observamos la coqueta plaza de toros donde emocionados pasamos la velada, por cierto en una corrida inesperadamente deslumbrante, que les comentaremos en la añoranza.
Esta temporada taurina en particular, la del 2025 ha sido afortunadamente larga, espléndida, como invariablemente lo habíamos soñado y planeado, pero plenamente conscientes de la improbabilidad de concretarse, por la cantidad de imponderables que la vida nos obsequia a lo largo de los meses, con situaciones complicadas o inesperadas.
Sin embargo, gracias a nuestro Dios Padre, por lo pronto todo ha resultado conforme a lo planeado, tanto en el plano familiar y personal, principalmente en cuanto a salud, así como en el entorno estructural, con posibilidades ejecutadas en un universo lleno de entusiasmo y felicidad compartida con mi Soberana, desbordante y pleno de alegrías constantes.
Temporada singular, clasificada por el mundo taurino como HISTORICA (con mayúsculas), destacándose entre las subliminales causas, determinadas de una competencia que no se había gestado en mucho tiempo, atreviéndonos a precisar desde hace varias décadas, porque para que esto suceda se debe generar una rivalidad única e irrebatible - sustancialmente muy de vez en vez, o de cuando en cuando - recitaría el poeta catalán Joan Manuel Serrat.
Esporádicamente, esto se da solo en algunas generaciones, como cuando en este inolvidable primer cuarto del siglo XXI, le podemos poner nombres y apellidos, apuntados por respetuosa antigüedad de alternativa; José Antonio Morante Camacho (Puebla del Río, Sevilla, España, 2 de octubre de 1979) y Andrés Raúl Roca Rey Valdez (Lima, Perú, 21 de octubre de 1996), próximamente les comentaremos sobre los enriquecedores enfrentamientos, tardes eufemísticamente fenomenales como dicen por acá.....Continuará.
AÑORANZA:
La tarde del 25 de agosto, con la sustitución de Morante (cornada en la víspera) por Alejandro Talavante, no desmereció de ninguna manera, por el contrario, las tres figuras incluidos; Sebastián Castella y José Mari Manzanares, salieron triunfantes, festejando sentidamente nuestra bella unión.
Olé! Olé! y Olé!!!
Hasta siempre, buen fin.