La NFL
vivió una semana 5 muy intensa, que apenas está por terminar con un partido atípico en martes por la tarde entre los Titans y los Bills .
De la emoción de ver a Alex Smith en el terreno de juego, el nerviosismo de cada golpe que sufría a la tragedia de una lesión similar que dejará fuera a Dak Prescott por el resto de la temporada y un futuro incierto para él y su carrera con los Cowboys .
Los Raiders nos recordaron que en un domingo cualquiera puedes ganar sin importar el rival y que nadie tiene algo garantizado, ni siquiera una joven promesa como Dwayne Haskins que parece no estará en los planes a futuro del equipo de Washington .
De perder tu trabajo como entrenador como Dan Quinn , del gerente general Thomas Dimitroff y hasta el coordinador equipos especiales que dejaron a los Falcons tras el terrible inicio y años de ser pretendientes en la Liga.
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La NFL
siempre nos tiene historias que puede rememorar cuando Cleveland inició 4 - 1 al mando de Belchick en 1994 o los Steelers iniciar invictos 4 - 0 desde el final de los setenta cuando ganaron los últimos dos Super Bowls con Chuck Noll.
En un mes, en una semana todo puede cambiar y un claro ejemplo es el cambio de partidos por los casos inquietantes de COVID-19 que cierran instalaciones y no permiten actividad por una persona que haya dado positivo en una organización.
El futuro es impredecible y las grandes noticias están a la mano como las tragedias en una liga que cambia en cada instante.
Eso es parte del encanto que tiene la NFL y que pareciera que le dará por fin el reconocimiento a un jugador del calibre de Russell Wilson que nos hizo vibrar el domingo por la noche para ganar un juego determinante en sus aspiraciones a un campeonato, es claro que lo que menos le importa es ser el más valioso de la temporada.
Cuando la NFL te enseña que el egoísmo de un premio no representa nada a dejar huella en la Liga, es el proceso que hoy lleva Russell Wilson con el resto de sus compañeros, aún nos quedan muchas historias que escribir semana tras semana.
Por ahora sigan disfrutando la temporada que no sabemos el rumbo que tomará y que sé que al leer estas líneas, nos hace regocijarnos y lamentarnos de lo excitante dependiendo cómo le haya ido a tu equipo, lo que es cierto es que la pasión de la NFL es asombrosa.
