Desde que Ucrania se independizó de la ex URSS en 1991, su economía no ha podido prosperar como se propuso a partir de esta separación. Cuando Ucrania intentó adherirse a la OTAN en 2013, surgió un intenso conflicto político que terminó con fuertes divisiones internas y enfrentamientos con el gobierno; todo ello, provocó que su crecimiento económico fuera prácticamente de cero, según cifras del Banco Mundial. La mala situación no sólo se prolongó a lo largo de 2014 y 2015, sino que empeoró hasta cerrar con tasas negativas de -10% y de -9.8% en su producto interno bruto (PIB). Aunque consiguió recuperarse en los siguientes años, en 2020 sufrió una recaída de -3.8% como consecuencia de la pandemia. Para este 2022, lo más probable es que, según estimaciones del propio Fondo Monetario Internacional, termine con una contracción de -35% derivada del conflicto bélico que tiene con Rusia.

Esta falta de crecimiento en su economía también viene acompañada de una importante caída a nivel sectorial. Por ejemplo, la participación de la industria como porcentaje del PIB en términos de valor agregado ha venido descendiendo. En 2001 fue de 29% y para 2020 bajó a 21%. Por su parte, en ese mismo periodo la agricultura pasó de 13.9% a 9.26%. A esta situación hay que sumarle que Ucrania no es una potencia económica en Europa ni en el resto del mundo, ya que en 2020 su PIB en términos reales ascendió a cerca de 98 mil millones de dólares, lo que la ubicó en la posición número 56 a nivel mundial.

En el contexto internacional, su papel en la economía mundial no es tan relevante, pues se limita a las exportaciones de ciertos productos básicos como el maíz, el trigo, aceites vegetales y hierro, que representan entre 2% y 3% de la producción mundial. No obstante, la situación del país sí ha terminado afectando los mercados de cereales a nivel global. Cabe recordar que la base de las exportaciones de Ucrania son los productos agrícolas, que representan más de 40% del total -entre estos, los productos alimenticios equivalen a 95%- y los bienes manufactureros, que representan 43% de todas sus exportaciones.

También es importante señalar que, de acuerdo con datos del Banco Mundial, en 2015 presentó una tasa de inflación de 38.9% y, a pesar de que desde entonces ha venido a la baja, aún se mantiene en niveles de casi 10%. Este contexto, de bajo crecimiento, de inflación elevada, de una deuda pública de 49% como porcentaje del PIB, y de un PIB per cápita a precios corrientes de cerca de 6 mil 720 dólares por habitante (FMI), mantiene a Ucrania como uno de los 152 países en vías de desarrollo.

Finalmente, de acuerdo con el portal del Banco Mundial, Ucrania es un país cuya población ha venido descendiendo en los últimos 20 años, al pasar de 49 millones de habitantes a un poco más de 44 millones en 2020, situación que probablemente va a continuar por las muertes causadas por la actual guerra y la migración de miles de ucranianos fuera de su país.

Académico de la Universidad del Valle de México, Campus Lomas Verdes

Google News

TEMAS RELACIONADOS