El gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, está a un año de terminar su mandato y no está de más revisar cuál ha sido su desempeño en esto últimos cinco años en materia económica.

Mas allá de su situación política, el Inegi reporta que Tamaulipas no formó parte de las 11 entidades que aportaron 66.1% al PIB nacional (Ciudad de México, el Estado de México, Nuevo León, Jalisco, Veracruz, Guanajuato, Coahuila, Baja California, Chihuahua, Sonora y Puebla) en 2019. Tampoco destacó en las actividades industriales, ni en las actividades primarias. Sobresalió en los sectores comercio y servicios, que en conjunto aportaron 69.5% en el PIB total nacional. Asimismo, fue de los pocos estados que tuvieron tasas de crecimiento positivo en todas las actividades económicas en el mismo año, a pesar de que la tasa de crecimiento anual del estado se ubicó en cuarto lugar a nivel nacional.

Desde el 2010 y hasta antes de que el actual gobernador asumiera sus funciones en el año 2016, la tasa de crecimiento promedio de Tamaulipas estuvo por debajo de la tasa de crecimiento del PIB nacional. En ese periodo la tasa nacional fue de 3.32% y en el estado de 1.91%. Esta situación no se ha revertido, desde el inicio de la actual administración estatal hasta 2019. Incluso cayó aún más, ya que la tasa promedio en el estado fue de 1.29%, mientras que en el país de 2%.

Cabe puntualizar que en 2016 la participación de Tamaulipas en el PIB nacional se ubicaba en el lugar número 14, posición que se mantuvo por algunos años hasta que en 2019 cayó hasta el puesto número 28.

Sumado a lo anterior, están los resultados de Coneval sobre el índice de Tendencia Laboral de la Pobreza que mide la proporción de personas que no puede adquirir la canasta alimentaria con el ingreso de su trabajo, mismo que a pesar de que no se ha incrementado sustancialmente, sí ha permanecido por encima del índice nacional, que se ubicó en promedio estos últimos cinco años en 1.01 y en 1.057 en el estado. Por último, el porcentaje de la población en situación de pobreza, en tan solo dos años, aumentó de 32.2% en 2016 a 35.1% en 2018.

*Académico de la UVM, Campus Lomas Verdes

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