El pasado 3 de mayo la Ciudad de México sufrió un duro golpe con el desplome de dos vagones de la Línea 12 del Metro. El accidente mató a 26 personas, dejó heridas a 80 más y en duelo por la pérdida a cientos de familiares, parejas, amistades, compañeros de trabajo. La tragedia despertó indignación porque pudo haberse evitado, por la negligencia, la corrupción, la impunidad y la indolencia gubernamentales. Al día siguiente, a la artista visual Margarita Adalid le tomó por sorpresa una llamada de la dirección de Cultura Metro. La galería que exhibía su obra había sido vandalizada.

La noticia del agravio “no me enojó, ni siquiera me sorprendió. El horror de los hechos ocurridos en la Línea 12 y la pérdida de tantas vidas por el accidente quedaron reflejadas en esos vidrios rotos. En las piezas cortadas están representados los heridos”. Para ella, la reacción espontánea de violencia de los manifestantes sobre sus obras “es un grito de auxilio”.

Dentro de una vitrina en la galería de la estación Chabacano, Línea 9 del Metro, se exponía “De lo Femenino”, una instalación que integra 19 fotografías a color y 14 piezas de textiles intervenidos. Inaugurada en noviembre de 2019, en el marco del Festival Foto México y de los 15 días de activismo contra la violencia de género, al atravesarse la pandemia del Covid-19, permaneció ahí durante todo el confinamiento. Metáfora involuntaria del encierro de tantas mujeres en el ámbito doméstico durante más de un año.

Margarita recogió lo que quedó de su obra luego de los cristalazos: las fotografías maltratadas por los vidrios rotos, algunas inservibles, y los textiles artesanales intervenidos con su propio bordado. Pero vio que faltaba una pieza: “Pajarera” su fotografía favorita, aquella donde aparece una mujer de Myanmar descalza vendiendo aves en la calle y cuya imagen, impresa en tela de gran formato, desapareció. Lejos de alarmarse, Adalid se conmueve: “porque esa mujer, anónima, a la que nadie ve, se unió a manos anónimas de otras personas a las que nadie ve tampoco. Algo entendieron al llevársela. Y le dieron otra vida”.

Vandalismo o grito de auxilio
Vandalismo o grito de auxilio

Me dice: “Vivimos imbuidos en la violencia, hay gran confusión sobre lo que va a pasar con este país y con nosotros; estamos en medio de caos e incertidumbre, la gente está al filo de la navaja ante cualquier provocación y todo se agudizó con la pandemia y los terribles encierros … Yo no quiero politizar mis piezas, pero creo que la gente está muy enojada y lo expresó rompiendo vidrios después de la tragedia de la Línea 12”.

Para Margarita Adalid, las mujeres de las fotos “salieron de las frías vitrinas para solidarizarse con las familias de los heridos y de las víctimas mortales”. Las piezas “cobraron vida en manos de la impotencia y la frustración”. No enaltece la violencia, intenta entender de dónde viene y le da una resignificación a su obra en el contexto de un país vandalizado y desesperado.

adriana.neneka@gmail.com