Once marinos más del grupo de 30 detenidos en 2021 por la desaparición forzada de cuatro personas en Nuevo Laredo, Tamaulipas, en 2018, salieron en libertad al obtener un amparo, con lo que suman 23 los absueltos por falta de pruebas.

Según fuentes federales, un capitán y 10 de tropa dejaron la noche del 26 de abril la Prisión Militar Número 1, de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en la Ciudad de México. Aún quedan siete navales presos por este caso.

Se trata del capitán Salvador Gerónimo Rodríguez y los elementos de tropa, Marco Antonio Pérez Rodríguez, César Rodríguez Moreno, Marco Antonio Euan Cach, Adrián Santos Hernández, Isaías Salazar González, William Tapia Oliva, Esequiel Gaspar Gonzaga, Eder Luis Martínez Soto, Julián Jaimes Santiago y Narciso López Martínez, procesados en la causa penal 155/2020 por el delito de desaparición forzada.

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Al respecto, el presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDH), Raymundo Ramos Vázquez, quien brinda acompañamiento jurídico a los familiares de las víctimas, afirmó que ni la Fiscalía General de la República (FGR) ni la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) ha notificado sobre la liberación de otro grupo de marinos y los avances en la investigación.

Consultada al respecto, la FGR respondió a este diario que la Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada no comparte información sobre el tema.

Sin embargo, las fuentes consultadas confirmaron a EL UNIVERSAL la liberación de los 11 elementos, algunos, pertenecientes a la Unidad de Operaciones Especiales (Unopes) de la Armada de México.

En noviembre de 2021, este diario publicó que el Juez Octavo de Distrito, con sede en Reynosa, Tamaulipas, Faustino Gutiérrez Pérez, dejó en libertad a 12 marinos detenidos por la desaparición forzada de Noé Ignacio Alférez Hernández, Jonathan Ballesteros, Manuel Gerardo García Ramírez y Marco Antonio Romero Sánchez en Nuevo Laredo, en 2018.

Tras analizar las acusaciones presentadas por la FGR, el juez determinó que no había pruebas de la participación de los marinos en la desaparición de Noé Ignacio Alférez y Jonathan Ballesteros, casos de los que se les imputa directamente.

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Los dichos que sustentaron la denuncia, indicó el juez, fueron “por referencia de terceros, que no presenciaron ni les consta que elementos de las Fuerzas Armadas hayan sido quienes privaron de la libertad a las víctimas”.

En abril de 2021, la Secretaría de Marina (Semar), puso a disposición de la FGR a los 30 marinos por su presunta participación en el delito cuando realizaban labores de vigilancia y disuasión en Nuevo Laredo.

“Es de resaltar que la Secretaría de Marina Armada de México en éste y todos los casos en que personal naval sea probable responsable de actividades tipificadas como delito, actuará con estricto apego a la ley, procediendo con rigor, contundencia y transparencia a la ciudadanía”, indicó la dependencia.

Días después de su detención, fueron vinculados a proceso los 30 navales, 23 de los cuales ya están en libertad.

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