En 10 años sólo queda la sombra de El Paraíso, el rancho que alguna vez fue uno de los principales centros de operaciones del Cártel de los Beltrán Leyva en Morelos y desde donde comandaban sus operaciones en el centro del país.
Aquí se daban las fiestas más lujosas, en las que se seducía a los visitantes con un lago artificial, un bar en un Partenón griego, una plaza de toros y un zoológico, caballerizas y 2.5 hectáreas de privacidad. Tras 12 años, mañana el lugar de descanso favorito del gran lugarteniente de los Beltrán Leyva, Édgar Valdez Villarreal, alias La Barbie, será rifado por la Lotería Nacional.
Luego de la detención de Valdez Villarreal el rancho fue saqueado en tres tiempos: el primero, por los familiares de los Beltrán Leyva, quienes, dicen los vecinos, se llevaron los objetos de mayor valor; el segundo, por las mismas autoridades, que se presume fueron quienes sacaron los animales del zoológico, y el tercero por los pobladores, quienes se llevaron hasta el cableado para obtener cobre.
El rancho se caracterizó por estar lleno de excentricidades; en la entrada, a la derecha tenía caballerizas para mostrar sus mejores ejemplares a sus invitados y nuevos socios, a la izquierda tenía un gran lago artificial, al fondo el salón de fiestas, establos e incluso un zoológico con tigres, cebras y hasta jirafas.
La propiedad, que se encuentra en la lista de premios que entregará la Lotería Nacional en el sorteo del miércoles 15 de septiembre, fue una de las incautadas en diciembre de 2009, tras la muerte de Arturo Beltrán Leyva en Cuenavaca.
Detrás de las caballerizas se tiene que caminar por un gran jardín para llegar a lo que en su momento fue un bar con una arquitectura tipo Partenón griego. Pasos más adelante se encuentra la estructura de lo que fue una gran alberca.
El hangar de El Señor de los Cielos
Más de 20 años atrás fue decomisada al sur de la Ciudad de México una mansión en el Pedregal de San Ángel que perteneció a quien fue líder del Cártel de Juárez, Amado Carrillo Fuentes, El Señor de los Cielos.
Era una de las propiedades favoritas de Amado Carrillo, tanto para vivir con su familia como para operar desde una de las zonas más exclusivas de la Ciudad de México.
El Señor de los Cielos se ganó ese alias por trazar rutas aéreas para traficar cocaína y ser de los primeros en tener alianzas con los capos colombianos para ganar plazas en Estados Unidos.
En más de 3 mil metros cuadrados hay una piscina con un domo que puede abrirse, jacuzzis y saunas, salón de fiestas y más de 10 habitaciones, en una de las cuales aún se encuentra una caja fuerte de 1.20 metros por un metro de ancho, en la que, de acuerdo con los registros oficiales, se decomisaron fajos de dinero y joyas tras la muerte del exlíder del Cártel de Juárez en 1997.
Este medio dio a conocer que la propiedad de Amado Carrillo Fuentes, El Señor de los Cielos, se subastaría con los inmuebles incautados al crimen organizado que el Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado (Indep) pone al alcance de las personas que buscan las mejores ofertas; sin embargo, tras ser sometido a puja al menos en tres ocasiones no se había logrado la venta, por lo que el gobierno federal decidió colocarla como parte de los premios del sorteo de la Lotería Nacional.
El palco de los 20 millones
Ahora, el gobierno busca que el palco, con valor de 20 millones de pesos, sea para un mexicano que, con mucha suerte y la inversión de 250 pesos, disfrute de sus 20 butacas, un baño, una cocineta y cuatro lugares de estacionamiento, y desde el sorteo y hasta el año 2065 con el mantenimiento pagado por 10 años.
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