Nos dicen que en medio de tantos nubarrones que tiene a su alrededor, este lunes el expresidente Enrique Peña Nieto tendrá motivo para celebrar: es su cumpleaños número 54.
Llega a este festejo en silencio, sin mañanitas ni mariachis en eventos públicos, como el que le organizó Rosario Robles en Tlalpa, Guerrero, para celebrar su cumpleaños 49 y que, al llevarse un bocado de pastel a la boca, se le cayó.
Este cumpleaños, nos comentan, puede tener un sabor amargo pues integrantes de toda su confianza, como la propia Rosario Robles , además de Emilio Lozoya y el abogado Juan Collado, enfrentan a la justicia mexicana, y varios de sus principales ex colaboradores están en la mira.
En la bancada del PRI en el Senado, en la que varios le deben el escaño al exmandatario, el silencio habla, pues ninguna felicitación pública se ha visto aún.
Hoy no hay en Twitter o Facebook decenas de mensajes de felicitación para el mexiquense pero sí un gran silencio de excolaboradores y clase política que lo respaldó en su mandato.
¿Será que algunos de ellos temen que tras la felicitación venga la investigación?
fml