El Foro Económico Mundial de Davos se convertirá a partir de hoy en el lugar donde los líderes del mundo abordan, junto con la sociedad civil y empresarios, los grandes problemas del mundo, incluyendo el acoso sexual.

Entre las discusiones y perspectivas económicas, la industria digital y el cambio climático, un tema de actualidad se incluye este año: el acoso sexual de la mano del movimiento #MeToo (Yo también) que partió de Hollywood, pero que afecta a más esferas del mundo político, artístico y empresarial, con un panel titulado “Género, poder y afrontar el acoso sexual”.

El foro ha querido dar una señal de apoyo: el encuentro —que se llevará a cabo del 23 al 26 de enero— será copresidido por mujeres. Ellas representan 21% de los 3 mil participantes.

En Davos también tendrá un espacio el debate sobre las fake news (noticias falsas) y la posverdad, término acuñado en Estados Unidos a raíz de la elección del presidente Donald Trump, y en el que los hechos no son tan importantes a la hora de influir en la opinión pública como los llamamientos a la emoción y la creencia personal.

Asimismo, el foro dedicará varias sesiones a las amenazas cibernéticas, tan de actualidad por los recientes ataques mundiales a empresas y la injerencia rusa a través de las redes en diferentes elecciones, y lanzará, además, el Centro Global para la Ciberseguridad para fomentar la cooperación.

En tanto, la Casa Blanca confirmó que el presidente Trump participará en el Foro Económico Mundial en Davos esta semana, tras el acuerdo alcanzado en el Senado para poner fin al cierre parcial de la administración federal.

“Si todo pasa como está previsto (...) el presidente viajará esta semana”, dijo Sarah Sanders, portavoz del ejecutivo estadounidense.

Se prevé que el magnate intente posicionar su política de “América First” (Estados Unidos Primero) en el evento. También aprovechará su viaje para reunirse con varios dirigentes, entre ellos la primera ministra británica, Theresa May. Este encuentro podría servir para calmar las tensiones tras una larga serie de contratiempos entre Washington y Londres, el más reciente, la cancelación de la visita del magnate a la capital británica.

Se esperaba que la presencia del magnate desatara protestas pero, al parecer, el clima jugó a su favor. Las autoridades de Davos informaron ayer que las fuertes nevadas limitaron el espacio libre en la ciudad, por lo que no se podrán llevar a cabo las manifestaciones de socialdemócratas, verdes y otros grupos políticos.

La rama juvenil de los socialdemócratas suizos acusó a las autoridades de ceder ante las élites globales y criticó la decisión como “una escandalosa restricción de la libertad de expresión”.

El foro de Davos recibirá este año a 70 jefes de Estado o de gobierno y 38 responsables de grandes organizaciones internacionales.

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