Washington.— La creciente llegada a la frontera sur de de miles de menores migrantes se ha convertido en un desafío para la administración de Joe Biden, opacando el logro de que se aprobara, la semana pasada, su plan de estímulo por 1.9 billones de dólares.

Gobernadores y legisladores republicanos estuvieron ayer en los principales programas de la televisión estadounidense y culparon a Biden de haber creado una crisis en la frontera.

En la cadena Fox News, el senador republicano Bill Cassidy aseguró que Biden tiene toda la culpa del creciente número de menores migrantes de El Salvador, Honduras y Guatemala que han llegado en las últimas semanas a la frontera y que han colapsado el sistema de acogida: “Uno no puede evitar darse cuenta de que ha cambiado el gobierno y de que ha habido un aumento”, se quejó.

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En CBS News, el gobernador de Arkansas, el republicano Asa Hutchinson, abogó por una política migratoria más dura porque, de lo contario, “habrá una crisis humanitaria que se prolongará este año”. Otro gobernador republicano, Greg Abbott, de Texas, señaló en Fox News que “los agentes de la Patrulla Fronteriza me dicen que las políticas de la administración Biden están enriqueciendo, empoderando a los cárteles de la droga en México, que obtienen dinero de la gente a la que ayudan a traficar al estado de Texas”.

Indicó que, con base en la información de los agentes fronterizos, este año ya van 110 mil detenciones de migrantes en el sector del Valle del Río Grande, superando los 90 mil en esa zona en todo el año pasado.

Según cifras publicadas el lunes pasado por The New York Times, tres mil 250 menores migrantes fueron detenidos en las últimas dos semanas en la frontera y están siendo arrestados en unos centros de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) que están diseñados para albergar adultos, no niños y donde pasan más de los tres días que están establecidos como máximo antes de que se les traslade a albergues, debido a que los centros están colapsados.

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Los demócratas se niegan a hablar de crisis y defienden la gestión de Biden, asegurando que la situación actual es resultado de la destrucción, por parte de la administración anterior de Donald Trump, del sistema de acogida que había antes de su llegada al poder: “Lo que estamos viendo hoy es la consecuencia de cuatro años en los que se desmanteló cualquier sistema para abordar esto con humanidad y con compasión”, afirmó en CNN la legisladora demócrata Verónica Escobar, representante de El Paso (Texas) y que esta semana visitó uno de los centros donde son procesados los migrantes.

Escobar dijo que los migrantes están en condiciones inaceptables, pero atribuyó la falta de medios al gobierno de Trump y aseguró que Biden está trabajando día y noche para mejorar la situación. La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, defendió que Biden ha heredado un sistema roto y lo alabó por velar por el bienestar de los menores. Frente a la creciente oleada, Biden ordenó el sábado movilizar durante 90 días a la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA) para atender a esos menores, albergarlos y darles transporte.

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En medio del debate migratorio, la celebración por el plan de estímulo ha quedado relegada a un segundo plano. La Casa Blanca espera devolverle protagonismocon una gira por todo el país que lleva el nombre de “La ayuda ya está aquí” y que busca explicar a los estadounidenses cómo el paquete de rescate puede mejorar sus vidas, golpeadas por la pandemia.