Todo parece indicar que la coordinadora del PT en el Congreso local, Circe Camacho Bastida, será una aliada incómoda de la bancada de Morena, pues desde la primera reunión de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) dejó en claro que no será su incondicional en los trabajos legislativos. Incluso, hace unos días lo manifestó abiertamente al mencionar que apoyará las causas que considere justas, aun si son impulsadas por la oposición. No hay que olvidar que Morena le cedió a doña Circe un diputado para conformar la bancada del PT, por lo que veremos si aguanta la presión en el futuro y cumple con hechos, no palabras, como dirían por ahí.

Covid-19 sigue pegando a los diputados

Ahora que el diputado local del PAN, Diego Garrido López, estaba decidido a demandar penalmente a su homólogo de Morena, Alberto Martínez Urincho, por presentarse a la sesión del pasado 30 de agosto con Covid-19, el panista dio a conocer que él también contrajo la enfermedad. Don Diego había calificado como una irresponsabilidad el comportamiento del legislador morenista por presentarse a la sesión sabiendo que estaba infectado. Ahora serán los demás diputados panistas los que tendrán que hacerse la prueba para ver si alguno más da positivo. Esta pandemia, nos hacen ver, se niega a ceder en el Congreso.

Dictamen que resultó ser oro molido

A quien le llegó como oro molido el dictamen final de la empresa noruega DNV sobre el colapso de la Línea 12 del Metro, fue a la defensa del exdirector del proyecto Metro, Enrique Horcasitas, al revelar que desde 2019 se detectaron irregularidades en la zona del accidente, con lo que los abogados insistirán que la caída de la trabe se debió a una falta de mantenimiento. Ayer, el secretario de Obras, Jesús Esteva, aseguró que dicha situación no influyó en el percance y que no se veía a simple vista. Todo indica que la historia en tribunales por el caso de la llamada Línea Dorada está en pleno inicio.

Se balconea síndica panista

No cabe duda que eso de las sesiones virtuales es un arma de doble filo. Por un lado, permite continuar con las reuniones de trabajo, pero por el otro, te pueden balconear. Eso fue lo que le sucedió a la síndica del PAN, Sandra León Hernández, quien durante la reunión del Cabildo del ayuntamiento de Naucalpan dejó el micrófono abierto y se escuchó claramente: “Tráeme mi ropa, mi calzón y todo para vestirme. Ciérrame la puerta porque yo tengo frío”. Esto generó la risa de sus compañeros síndicos y regidores, al tiempo que la coordinadora le pidió de inmediato apagar su micrófono.

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