Capitalinos han visto una baja afluencia de personas en los Kioscos de Salud para aplicarse la prueba gratis para detectar el Covid-19, por lo que alertaron que las personas no deben confiarse, pues la capital del país aún se encuentra en semáforo naranja.
Liliana Mendoza y su hermano Édgar, quienes han acudido en tres ocasiones a realizarse la prueba en distintas alcaldías, debido a que han tenido que cuidar a sus padres contagiados, refirieron que han visto baja afluencia en tres semanas, pues las primeras veces que acudieron a un kiosco encontraron fila para poder atenderse y esta vez no.
“La gente ya está saliendo más y no creo que se estén cuidando. Tal vez ya nos acostumbramos o se nos hace muy común esto, pero al parecer sí ha bajado”, dijo Liliana, mientras que su hermano comentó: “Sigan usando cubrebocas, porque esto sí es real”.
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“A todos nos ha pegado [la pandemia por coronavirus], tanto económicamente como personalmente; dicen que no es verdad, pero cuando tienes al enfermo en casa es difícil, mucha gente no sale”, comentó Édgar.
Ambos jóvenes dijeron que es importante continuar con las medidas sanitarias, pues muchos piensan que guardar sana distancia es una broma, pero, aseguraron, es fundamental para evitar contagios de coronavirus.
Recorrido
EL UNIVERSAL acudió al Kiosco de Salud ubicado en la Alameda del Sur, en la alcaldía de Coyoacán, donde la asistencia fue baja desde las 11:00 horas hasta las 14:00 horas, momento en el que el personal de salud encargado de aplicar las pruebas comenzó a recoger todo el material.
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Principalmente en esta zona acudieron jóvenes, quienes señalaron que iban a realizarle la muestra, por prevención, ya sea porque permanecen mucho tiempo en la calle por cuestiones laborales o porque es un requisito que les han pedido en sus centros laborales, para poder reincorporarse del home office.
Hasta ese punto lo alcanzaron otros de sus amigos, quienes pasaron consecutivamente para que el personal introdujera el hisopo en su nariz.
Al salir de la carpa de salud, las lágrimas se hicieron presentes y, luego de limpiarse las manos con gel antibacterial, los jóvenes tocaron su nariz, como intentando aliviar el malestar que les había causado la muestra.
La baja afluencia generó que los resultados rápidos fueran entregados por los médicos de manera constante, sin demora, y para evitar aglomeraciones.
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“Ahora sí lo metieron mucho [el hisopo], lo hicieron con saña”, dijo uno de los jóvenes, luego de salir de la muestra.
De las personas consultadas, ninguna aseguró haber necesitado realizarse una prueba por haber acudido a alguna fiesta o reunión, simplemente acudieron para prevenir y evitar contagiar sin darse cuenta.
Conforme pasaban las horas, los trabajadores de la salud llamaban a los paseantes por la Alameda del Sur, para que se hicieran la prueba, esto también para no dejar reactivos sin utilizar durante la jornada.
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El servicio se vio suspendido durante breves minutos debido a una sanitizacion general por parte de cuadrillas de limpia de la alcaldía.
El señor Javier Hernández dijo a esta casa editorial que es la primera vez que acudía a realizarse la prueba, pues en su trabajo se la solicitaron, pero que él se sentía bien y sin síntomas.
Durante toda la jornada EL UNIVERSAL no observó a alguna persona que haya salido positivo a Covid-19.