Cuida tus pies de las largas jornadas de trabajo en la cocina

Trabajar en la cocina no es fácil, y los profesionales de la gastronomía lo saben, porque no solo se trata de uno de los oficios más exigentes en cuanto a precisión y rapidez, sino que debido a su naturaleza, los cocineros deben estar de pie durante largas jornadas, lo que puede causarles problemas en la salud.

Cuida tus pies de las largas jornadas de trabajo en la cocina

Foto:  Free-Photos / Pixabay 

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Por ello es imprescindible que usen el calzado apropiado para llevar a cabo su labor, incluso medias o calcetines de compresión para mitigar el cansancio y otros problemas, como el desarrollo de várices. El problema común que llegan a padecer las personas que están de pie por mucho tiempo y estáticos, es que los vasos venosos tienden a disminuir su flujo, la carga se comienza a ir hacia debajo de los pies, por lo que el retorno venoso se vuelve complicado y eso puede propiciar que se presente insuficiencia venosa periférica.

1. 10 horas es la jornada mínima para un cocinero o personal de sala en el que están de pie.

De modo progresivo origina que se formen várices, que a su vez pueden condicionar que se hagan trombos que pueden viajar a otras regiones de las extremidades inferiores, incluso a nivel pulmonar. Las personas con largas jornadas de trabajo de pie pueden presentar ciertos malestares, como piernas cansadas, con adormecimiento, incluso disminución de la fuerza y de la masa muscular. Esto podría llevar a una deformación progresiva de las extremidades inferiores, y aunado a un calzado incorrecto, va a alterar la biomecánica del pie, explica Jesús Solís González , médico especialista en ortopedia y traumatología, artroscopia, reemplazos articulares y cirugía de columna.

Cuida tus pies de las largas jornadas de trabajo en la cocina

Foto: Cortesía

1. 2 litros de agua te ayudará a aminorar el cansancio y mantener te hidratado en la cocina.

Añade que “a la mejor dices, ‘hoy pasé ocho ó 10 horas parado y no tengo nada más que los pies adoloridos’. No obstante, hay algo que debes de conocer: qué tipo de biomecánica tiene tu pie, qué tipo de deformidades ya tiene tu pie a través de los años, puede ser que tengas un pie pronador, un pie flexible o cavo, entre otras patologías”.

El ortopedista comenta que si se tiene algunos de estos problemas, como puede ser el pie pronador, con esta pisada la biomecánica del tobillo y la rodilla van a cambiar. Por ende, también la de la columna lumbar. Y, si a eso se le agregan las largas jornadas diarias durante meses o años, con ese tipo de trabajo habrá un deterioro progresivo a las articulaciones, a los cartílagos articulares, a las masas musculares, también deformidades de los dedos, como los juanetes, además de problemas del sistema circulatorio como puede ser insuficiencia venosa periférica (várices). Por todo esto, es necesario tomar medidas de prevención para evitar complicaciones a futuro son dolorosas.

El médico señala que para evitar algún tipo de problema, el cocinero tiene que conocer su biomecánica, acudir con un ortopedista para que evalúe su pisada. Si tiene alguna alteración en el pie, en algún dedo o una uña, que haga una valoración integral para entonces comenzar a usar el calzado apropiado.

1. Después de tu jornada de trabajo, eleva los pies apoyados sobre la pared (ya sea que estés en tu cama, el piso y un sofá). Manténlos así por 15 minutos para que tu circulación sanguínea mejore.

Cuida tus pies de las largas jornadas de trabajo en la cocina

“De hecho, existen marcas de zapatos y de tenis , encaminadas al trabajo o labor que desempeñes. Para cocineros hay una variedad de zapatos de marcas conocidas. Crocs y Birkenstock originaron líneas de calzado para especiales ergonómicos y antiderrapantes. Otra alternativa que también ayuda mucho es que la persona haga un poco de ejercicio para fortalecer las masas musculares, tanto de sus pies como de sus piernas.

Eso va a ayudar también a mejorar el retorno venoso. Otro punto que también ayuda es usar medias de compre- sión. Aquí es importante evaluar como está el retorno venoso para poder decidir qué tipo de presión necesita utilizar la persona, porque hay suave, moderada y alta, y algunas van debajo de la rodilla, otras llegan al muslo, incluso pueden llegar hasta la pelvis”, afirma el entrevistado.

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Aclara que, si te dedicas a la gastronomía u otra labor que requiera largas jornadas de pie, es muy importante que te hagan una valoración (de la pisada) y ver qué tipo de calzado, media o calcetín, necesitas, así como el tipo de ejercicios para que el desgaste no sea tan rápido.

En caso de que la persona ya presente problemas a causa de su trabajo, hay manera de detener el deterioro. “Una de las patologías más severas que sufren los cocineros son los juanetes, la deformidad del primer dedo y del quinto dedo, el arco caído y la fascitis plantar, por mencionar algunas. Se pueden corregir con el uso del calzado adecuado o con plantillas que se colocan dentro de los zapatos; las medias de compresión también pueden ser de gran ayuda, así como el ejercicio, porque pueden detener la formación de várices, y se puede re- vertir de forma progresiva el deterioro de los vasos sanguíneos, puntualiza.

1. TIPS PARA EVITAR LA FATIGA:
2. _ Usa el calzado adecuado. No utilices botas o tennis, busca zapatos de trabajo con una plantilla que sea comfortable. Recuerdo
3. siempre utilizar calcentines.
4. _ Medias de comprensión. Ya sean medias o celcetas, son necesarias para que mantengas una óptima circulación sanguínea y con ello, evitar dolores o molestias (como las várices) a largo plazo.

El médico agrega que hay que tomar en cuenta otro factor: que si el cocinero es diabético o hipertenso, podría hasta perder alguna de sus extremidades si no pone atención en la salud de sus pies. “Si el paciente es hipertenso y llega a desarrollar insuficiencia venosa , puede tener problemas de trombosis, de insuficiencia vascular, taponamientos vasculares, y esto puede llevar a perder una extremidad. Muchas veces no le hacemos caso a los pies hasta que nos duelen. Valdría la pena ir con el médico facultativo, el ortopedista o el vascular, para que su condición mejore”, advierte.

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Por otra parte, el chef Ricardo Alberto Centeno Gaona enfatiza que en las cocinas no hay un banco o silla para tomar un descanso, ni tampoco un tiempo muerto que los obligue a descansar por un rato, “las jornadas de trabajo son continuas”, finaliza.