Turismo en el istmo, un plan sin recursos

Al igual que con el Tren Maya, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador planea impulsar el potencial turístico de los municipios que serán impactados por el proyecto del Corredor Interoceánico, cuya columna vertebral es el Tren Transístmico. Lo hará, asegura, desde una visión comunitaria. El problema es que hasta ahora nadie ha informado a las comunidades y no hay certeza de que existan recursos para llevar a cabo el plan.

El proyecto, que promueve el gobierno federal a través de la Secretaría de Turismo (Sectur) y del Corredor Interoceánico (CIIT), forma parte del Programa para el Desarrollo del Istmo de Tehuantepec y busca que los municipios de Oaxaca y Veracruz que se ubican en la ruta del Tren Transístmico desarrollen su vocación turística de manera comunitaria y sostenible.

Según Miguel Torruco, secretario federal de Turismo, el objetivo es “crear circuitos, propiciar la rentabilidad de actividades con programas de apoyo a proveedores y operadores de oferta turística, asegurar prácticas responsables en el manejo de los recursos de la región y garantizar un impacto económico positivo en las comunidades”.

Sin embargo, de acuerdo con autoridades municipales del Istmo y funcionarios de Oaxaca, ese plan no ha sido consultado con las comunidades ni cuenta con recursos económicos que posibiliten su puesta en marcha, lo que pone en duda su viabilidad.

“Actualmente, el turismo no es una actividad preponderante en la región debido a los altos índices de rezago social y la falta de infraestructura”, pero con apoyos “podrá convertirse en motor de impulso al desarrollo del país”, señalaron la Sectur y CIIT el pasado 7 de agosto, cuando presentaron el plan.

Inicialmente, se considera a 18 municipios de Veracruz y a ocho más de Oaxaca para desarrollar su vocación para el turismo de naturaleza, cultural, de negocios, deportivo y comunitario.

En el Istmo oaxaqueño destacan Magdalena Tlacotepec, Santiago Laollaga, Ciudad Ixtepec, Santo Domingo Tehuantepec, Santa María Jalapa del Marqués, Juchitán, Matías Romero y Salina Cruz.

EL UNIVERSAL buscó a los ediles de estas localidades y la mayoría informó que desconoce la existencia de ese plan, pese a que, de acuerdo con la Sectur, desde el 25 de mayo se trabaja en la elaboración de un análisis detallado acerca de la situación y potencial turístico del Istmo.

“Nadie nos convocó a esas cinco reuniones que se realizaron de manera virtual, y menos a las 22 reuniones internas”, comenta Rodolfo de la Cruz, edil de Magdalena Tlacotepec, una de las comunidades zapotecas donde hay un balneario conocido como Ojo de Agua, que atrae a cientos de turistas de Chiapas.

El edil admite que impulsar el turismo comunitario y sostenible es una propuesta excelente que ayudará a generar empleos e ingresos, pero, para ello, dice, se necesitarían apoyos económicos como, por ejemplo, para construir cabañas y comedores.

Rogelio Cheng, alcalde de Ciudad Ixtepec, explica que se enteró del inicio de las sesiones virtuales, pero no fue invitado.

Ixtepec tiene espacios para el desarrollo turístico, como La Ba’ Cuana, un antiguo centro ceremonial zapoteca con pinturas rupestres, pero el munícipe dice que primero se requeriría dinero para su rescate.

Emilio Montero, presidente municipal de Juchitán, reconoce que tampoco fue invitado a ninguna sesión sobre el proyecto, pese a que esta ciudad zapoteca tiene mucho que aportar en cuanto a turismo cultural, como tradiciones y gastronomía, pero precisa que se requiere de fuertes inversiones para apuntalar las ofertas turísticas.

“En Salina Cruz, que es el punto de origen del Transístmico y la palanca principal del Corredor Interoceánico, no supimos de esas reuniones. No fuimos invitados”, agrega Juan Carlos Atecas Altamirano, edil del puerto, quien coincide en que el plan exigirá grandes fuentes de financiamiento.

¿Y los recursos?

“El plan que tiene el gobierno federal para impulsar el turismo comunitario y sostenible en el Istmo nos parece bien a nivel estatal y por eso hemos aportado toda la información que nos han requerido”, explica Abdón Vásquez Villalobos, subsecretario de Turismo de Oaxaca.

El funcionario dice que nadie puede negarse a un proyecto turístico de esa naturaleza, que busca “propiciar la alta rentabilidad de las actividades del ramo”, pero el problema, remarca, es que el gobierno federal no quiere destinar recursos.

“Hemos tenido reuniones virtuales, nos traen especialistas y nos dicen qué podemos hacer, pero, ¿el dinero? Si el gobierno tiene recursos para todo el Plan para el Desarrollo del Istmo, ¿por qué no pone el financiamiento que impulse ese proyecto de turismo comunitario?”, expresa.

“La Sectur nos pide: promocionen turísticamente al Istmo. Sí, ¿pero qué ofrecemos? En los pueblos del Istmo no tenemos buenas carreteras, tampoco se cuenta con servicios adecuados ni la conectividad que tiene la capital oaxaqueña o los destinos de playa, y la inseguridad es una realidad”, admite.