Tijuana.— Con la presencia de la variante ómicron en Baja California, la cifra de contagios se disparó y diariamente se rompe un récord histórico, con más de mil nuevos casos cada 24 horas; pacientes sospechosos duermen afuera de los centros médicos para acceder a las pruebas PCR y no todos alcanzan una.
Son las cuatro de la madrugada, la temperatura marca unos 10 grados, pero ni el frío ni la hora hacen desistir a los cientos de personas que ya hacen fila afuera de la Clínica 27 del Seguro Social, en Tijuana, para hacerse un examen y descubrir si tienen o no coronavirus: para algunos de ellos será necesario, incluso, pasar otra noche ahí, a la intemperie, en un mar de gente que se asume sospechosa de portar el virus.
Desde la semana pasada, la Secretaría de Salud en Baja California reportó un repunte de contagios que diariamente rompía su marca histórica desde el inicio de la pandemia, en marzo de 2020. Nunca antes se habían alcanzado estos números, que hasta el 2 de enero reportaban 88 casos confirmados en 24 horas, una cifra que para los días siguientes se disparó hasta los 600, 800, y en los últimos cuatro, más de mil casos nuevos diarios.
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Desde abril de 2020, cuando se registró el primer caso en la entidad, hasta el 9 de enero pasado, se han contado 97 mil 614 contagios, de los cuales, 6 mil 90 fueron en las últimas dos semanas. Es decir, sólo en ese periodo se concentra 6% del total en los casi dos años de pandemia.
“Todos venimos por una prueba”
De entre una fila que se arremolina a varias calles de la Clínica 27 del IMSS, en la zona este de Tijuana, un joven con más de 20 horas de espera en la línea lanza una frase al aire que, además del frío, congela al resto de las personas.
“Todos venimos por una prueba… pero si no tienes Covid-19 seguro que aquí entre tanta gente te contagias porque te contagias”, algunos responden entre risas, pero otros con la tragedia en los rostros, con los ojos rojos, nariz constipada y una tos molesta que no se va, guardan silencio y se arman de paciencia. Nadie quiere retirarse sin una prueba.
Una mujer narra que llegó el lunes en la mañana para hacerse una prueba PCR, pero desde la tarde de ese día la fila dejó de avanzar. Todavía el martes por la madrugada esperaba su turno.
De vez en cuando sale personal del edificio para darles alguna noticia. No hay pruebas, les dijeron el lunes en la tarde; luego, que la persona encargada se había retirado y nadie volvió a salir.
Ella, al igual que muchos, se plantó en un par de sillas afuera de la clínica, se escondió bajo una cobija para enfrentar la noche helada, y no se retira del sitio porque debe tramitar su incapacidad por contagio de Covid-19, pero en casi 20 horas nadie le ha resuelto su problema, y sin ese documento, tendría que regresar a trabajar o aceptar un descuento por no poder comprobar su enfermedad.
Los patrones les piden a los empleados la prueba Covid del IMSS y el trámite de incapacidad, lo que rebasó el sistema.
Autoridades del sistema de Salud local reconocen la falta de reactivos en laboratorios para resolver la demanda de pruebas PCR, principalmente en los centros del Seguro Social, pero incluso en laboratorios particulares empiezan a registrar desabasto para aplicar los exámenes por día, debido al repunte de solicitudes.
De acuerdo con la Asociación de Recursos Humanos de la Industria en Tijuana, esta semana se ha registrado un ausentismo laboral de 3%, el cual es atribuido a la actual ola de Covid.
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Autoridades toman medidas
Mientras el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo, anunció el relanzamiento del Permiso COVID-19 en línea para facilitar el proceso de incapacidad, y con ello romper las cadenas de contagio, la gobernadora Marina del Pilar Ávila informó el regreso del color naranja al semáforo epidemiológico estatal y de restricciones como la disminución a 50% del aforo en sitios de alta concentración de personas.
“Las distintas variantes, como ómicron, nos han arrojado cifras récord de contagios, superando más de mil casos activos en 24 horas en promedio”, advirtió la gobernadora.
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