La pasión de Cristo, de Mel Gibson, no es una película amigable; La última tentación de Cristo, con Willem Dafoe, fue malentendida por varios y la mexicana El crimen del Padre Amaro, con Gael García, podrá tener valores cinematográficos, pero tomó el camino fácil de ver sólo la parte negativa de la religión.

Así reflexiona Juan Carlos Carrillo, presidente del Comité de Cine de Signis en México, en el marco de esta Semana Santa, con respecto a algunas de las cintas que representan un momento de la vida de Jesús.

“Hay muchas películas que pueden verse en familia en estas fechas; hay otras que más que no recomendarlas, porque cuando a la gente le dices que no vea tal cosa lo hace, hay que aclarar que quizá tienen otra visión”.

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Signis, asociación internacional para comunicadores católicos, anualmente entrega, junto con otros grupos religiosos, el Premio Ecuménico en festivales internacionales como Berlín y Cannes.

Otra óptica sobre la vida de Jesucristo
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