Diana Spencer, Princesa de Gales

o Lady Di , fueron algunos de los nombres que la recibió en vida. Su muerte, a pesar de ser una de las tragedias más recordadas del mundo, nos deja la incógnita sobre toda su vida: ¿quién era realmente Diana Frances Spencer?

Hasta el momento se han inspirado en su vida y obra películas como: “Diana” (2013) con Naomi Watts, “La princesa enamorada” (1996) y “Spencer” (2021) con Kristen Stewart. En documentales “Diana: in her own words” (2017), “Diana: the day britain cried” (2017), “Diana, our mother: her life and legacy” (2017).

A través de libros, películas, entrevistas y documentales sobre su historia como princesa nos pintan las posibles caras de Diana. Un lado de luz; en el que ella es filántropa, una madre abnegada y cariñosa, activista y leal esposa. Otro lado oscuro que muestra a una mujer depresiva, bulímica, infiel y hasta promiscua.

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Hay muchos secretos que se esconden en quien fue realmente la difunta exesposa de Carlos, príncipe de Gales . Sólo nos quedan los filmes, documentales y libros que tratan de desenmascarar a este también ícono de la moda y furor de los medios de comunicación. Te presentamos algunas de las diferentes caras de Diana a través de lo ya dicho y conocido en diferentes canales, obras y medios de comunicación.

La hija de un tormentoso matrimonio y la niña que soñaba con ser princesa

Diana Spencer nació en la nobleza británica y creció en Sandringham , un lugar cercano a los terrenos de la familia real. Hija de John Spencer, el VII conde de Spencer y de Frances Roche. Según el libro de Andrew Morton “Diana: su verdadera historia”, la princesa describía su infancia como traumática porque recordaba ver a su padre golpeando a su madre mientras ella estaba escondida detrás de la puerta y escuchaba siempre a su madre llorar.

Por ello, la madre la abandonó a los seis años de edad por el maltrato que sufría en su hogar. Diana cuenta en aquellas entrevistas con Morton que sus padres anhelaban tener un niño y tuvo esa sensación de que nunca fue lo suficiente para sus padres, ya que antes de que naciera ella había muerto el primer varón de los Spencer.

Además, mencionó que sus papás preferían regalarles cosas materiales a sus hermanos y a ella; aseguró que nunca recibió abrazos o besos. Ante la partida de su madre, Diana se volvió más cercana a su padre hasta que él decidió rehacer su vida con Raine de Dartmunth , una política y socialité británica con la que duró gran parte de su vida.

Lady Di

fue una niña que soñaba con ser una princesa y vivir en el gran palacio, fantaseaba con casarse con un príncipe y vivir un final feliz de cuento de hadas como el que sus padres no lograron hacer realidad. Años más tarde la tercera hija de los Spencer se iría del seno familiar y emprendería un viaje que pronto la haría ser princesa.

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La princesa con la que todos soñaban ser

Diana convirtió un cuento de hadas en realidad. Era una maestra de preescolar cuando comenzó a salir con el príncipe Carlos, que según los documentales y películas coinciden, necesitaba sentar cabeza cuanto antes. Era joven, con una imagen angelical, mucho carisma y un historial impecable del que su exesposo Carlos no podía presumir. Era perfecta para ser incluso la nueva reina de Inglaterra. En la última temporada de “The crown”, la serie de Netflix que refleja la vida de la corona británica, muestran a Diana como una chica traviesa e inteligente que captura sin dudas a toda la familia real y después a todo el público.

Su boda en la televisión causo furor, se presume que la vieron 750 millones de personas en todo el mundo. Veían en ella lo que muchas mujeres querían aspirar, su historia la hizo más cercana a su pueblo.

Cuando tomó su papel como princesa, como se comenta en el documental “Diana: in her own words” , era la manera en la que tocaba a su multitud, lo que los volvía locos porque nadie de la realeza hasta el momento se agachaba o se dejaba tocar por nadie. Todos la veían como una princesa humilde, una santa que poco a poco fue enamorando a la prensa y pueblo británico

La filántropa y activista

Otro de los muchos nombres que le dieron a Diana fue el de “la princesa del pueblo” por parte del primer ministro Tony Blair . La agenda de Diana consistía en estar presente en diferentes eventos benéficos, visitar escuelas u hospitales.

Algunas de sus colaboraciones importantes fueron en convertirse en la patrocinadora de Centreponit en 1992, una ONG que ayudaba a jóvenes sin hogar y a que tuvieran una mejor calidad de vida en el Reino Unido.

En 1997, colaboró con HALO Trust , otra ONG que tenía como objetivo acabar con las minas que la guerra civil en Angola había dejado allí. Visitó a niños que habían sobrevivido a las exploraciones, prestó su imagen para extender la campaña de pedir la prohibición internacional del uso de minas.

El recuerdo más presente del buen corazón y amor por las personas fue cuando ante el mundo que juzgaba y rechazaba a las personas con sida, una enfermedad mortal para la década de los 80, tomó la mano de un paciente del Hospital Middlesex con este padecimiento. Esto causó revuelo en los medios de comunicación, pues para muchos era un estigma el tocar, besar o abrazar a una persona con sida. Ella ayudó para que las personas dejaran atrás estas creencias y dejaran de discriminar.

Un ícono de la moda

Lady Di no sólo era conocida por su buen corazón, carisma y escándalos. También era un ícono de la moda desde los 80 hasta el día de su muerte. Miles de vestidos y conjuntos de reconocidos diseñadores la vistieron.

Ella inició con el pie derecho desde el día de su boda, a manos de los diseñadores David y Elizabeth Emanuel . Su vestido de novia estaba inspirado en el estilo de la reina Victoria. La tela era tafetán de seda marfil con encaje antiguo.

Su cola medía 7.62 metros de longitud, que se extendió por las escaleras de la Catedral de San Pablo, en Londres.

Incluso en los días malos ella sabía cómo vestir de lo mejor; “El vestido de la revancha” fue algo que marcó la historia de la moda. Era 1994 y el príncipe Carlos había anunciado su infidelidad con su amante Camilla un día anterior, esa mañana Diana vistió un vestido negro de seda corto con los hombros descubiertos y diseñado por Christina Stambolian. Se cree que usó negro porque para la realeza este color significa luto.

La ex nuera de la Reina Isabel II vistió también Dior, Versace, Channel, entre otras marcas de prestigio a la mano de diseñadores como Catherine Walker, el dúo Emanuel, Victor Edelstein, Bruce Oldfield, John Galliano, por mencionar algunos que se encontraban en tendencia en la época de vida de la princesa.

La madre rebelde

Dos hijos varones : Harry y William fueron la vida entera de la princesa Diana. En diferentes documentales y series se presenta a Diana como una madre rebelde que quería que sus hijos tuvieran experiencias más allá de las comodidades y reglas de la realeza. Los llevaba a comer a restaurantes de comida rápida o a algún parque de diversiones, algo muy inusual para alguien de la corona.

En el documental de HBO “Diana, nuestra madre: su vida y legado”, los hijos de Diana comentan:

“Ella era muy informal y alguien que realmente disfrutaba reírse y divertirse. Ella era una de los padres más traviesos. Ella entendía que había una vida fuera de las paredes del palacio”, comentó William para el documental.

Harry agregó: “Ella era nuestra madre, sigue siendo nuestra madre, tú sabes, como su hijo yo diría que era la mejor mamá del mundo. Nos llenó de mucho amor, eso es seguro”.

Las mil caras de la Princesa Diana
Las mil caras de la Princesa Diana

La esposa infeliz y traicionada

Una de las caras menos agradables de Diana fue durante su matrimonio, pues padeció cuadros de bulimia, depresión y autolesión.

El medio “Daily Mail” publicó las entrevistas hechas por la fallecida Spencer en las que ella admitía que estos cuadros eran provocados por su relación con Carlos y lo hacía para liberarse de la tensión. Además era el príncipe quien la atormentaba con comentarios como: “Estás un poco gordita por aquí, ¿verdad?” lo que hacía que ella se sintiera mal con su cuerpo o se lastimara a sí misma.

Así vivió su matrimonio y lo retrató Netflix también en su serie “The crown”. O bien, el musical “Diana” de Broadway en el que tachan a Carlos de casarse sólo por compromiso. La realidad fue que él también la atormentaba debido a que sostenía una relación extramarital con Camilla Parker, una exnovia y amiga suya. Él nunca dejó de verla y Diana sabía esto desde el día que se casó, algo que nunca la dejó tranquila porque siempre tuvo que compartir el amor de su esposo con otra mujer, dejándola incluso en el segundo puesto.

Las mil caras de la Princesa Diana
Las mil caras de la Princesa Diana

Basta decir que Diana era encantadora y ante un tortuoso matrimonio no le quedaba más que buscar afuera lo que no podía encontrar en casa. Fueron varios amantes los que Lady Di tuvo durante su matrimonio con el príncipe de Gales. Uno de los más conocidos fue con el mayor James Hewitt, su primer amante, con el que tuvo una relación amorosa de cinco años e incluso se comentó que el príncipe Guillermo era su hijo por el tremendo parecido entre ellos. Este romance inspiró la película “Princess in love” (1996).

Otra de las relaciones más profundas de Diana fue con el cirujano y cardiólogo paquistaní Hasnat Khan, en el que la princesa llegó a pensar en convertiste en el islam por él. La prensa fue el motivo de la separación entre estos dos.

Su última pareja fue el millonario egipcio Dodi Al Fayed , que le regaló un costoso anillo de diamantes. Ambos cenaron en el hotel parisino Ritz poco antes de que ella falleciera en el accidente automovilístico.

Diana, la mártir

Una madre amorosa, presa de un mundo de reglas y de la prensa malintencionada que seguía minuciosamente cada uno de sus pasos.

Altruista con un corazón solidario y humilde que pudo romper muchos estigmas. Una mujer al borde de la locura con depresión, ansiedad y bulimia por un matrimonio fallido y poco sincero. Un ser que defendía sus ideales. Para finalizar una muerte trágica que si bien muchos señalan que fue la misma corona quien lo provocó.

Todas estas características hacen de Diana una mártir ante el ojo público y es adorada y recordada en todo el mundo como una santa por sus acciones benéficas y desinteresadas. De esta manera será interpretada por Kristen Stewart en la película “Spencer”, dirigida por Pablo Larraín , que planea asemejarse a un thriller psicológico sobre la disolución de un matrimonio y una mujer a punto de estallar.

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