Pamela Cerdeira

tenía 19 años la primera vez que le dieron una oportunidad en radio, pero la persona que la contrató le advirtió que las locutoras mujeres ya estaban pasando de moda. En aquella época, 1998, aunque ya había mujeres en las cabinas, todavía era un medio permeado de masculinidad.

Hoy Cerdeira reconoce, que aunque tardó tiempo en darse cuenta de la carga machista que aquel comentario tenía, supo ignorarlo para seguir su camino.

“Así como pasa en la locución, en la televisión, pasa en todas las transmisiones, no somos más que un microcosmos de lo que sucede afuera, pero sí creo que si hubiese sido hombre quizá me hubiera tardado menos tiempo en llegar hasta acá”, reconoció la locutora en entrevista.

Recientemente Cerdeira comenzó un proyecto de televisión titulado “De pisa y corre”, donde comparte créditos con Hiram Hurtado, pero además está al frente del programa de noticias “A todo terreno” en MVS .

Aunque acepta que el camino no ha sido fácil considera que poco a poco se ha abierto espacio para que las mujeres participen en programas donde antes sólo había presencia masculina.

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“Creo que ahora quienes están a cargo de los medios de comunicación están conscientes de la importancia de incluir a la mujer y también las mujeres entendemos de otra forma lo que es valioso para las audiencias y eso se está viendo reflejado. Lo que nos falta todavía es que haya más mujeres en puestos de toma de decisiones, mientras no existan más mujeres en los altos puestos ejecutivos el techo de cristal está puesto detrás del micrófono”.

A través de la radio Pamela ha aprendido a compartir con su público el mensaje de empoderamiento que rige su vida. Además de sus programas tiene dos podcast, “La del día”, que es un resumen informativo diario y “Extraordinarios”, que es uno de los más escuchados en América Latina, donde hace conversaciones con grandes personajes latinos. Mon Laferte, Lila Downs y Michelle Rodríguez son algunas de las mujeres con las que ha compartido.

“Nunca pensé que mi contenido podría implicar un valor para el público hispanohablante, es una friega porque aunque fueran dos minutos, yo los grabo, edito, los subo y cuando no lo hago veo como la audiencia me lo cobra, pero es algo totalmente mío y me siento muy orgullosa”.