Así nomás, de silbidito, componía José Alfredo Jiménez, quien dejó innumerables éxitos musicales sin saber siquiera tocar la guitarra pero, ¿qué pasa por la cabeza de otros letristas que crean canciones que, después de un tiempo, la gente desearía olvidar? Hoy, en el Día del Compositor, explicamos el .

“Chacarrón”, “Baby shark”, así como la “Macarena” son composiciones que muchos las catalogarían como las peores de la historia, pero a pesar de todo y contra todo pronóstico han sido un éxito mundial, incluso algunas de ellas se han convertido en una tradición.

“Son canciones pensadas, mas no sentidas, eso no se puede sentir; son canciones pegajosas y, aunque no digan nada, el ritmo atrapa a ciertas personas, pero afortunadamente es una minoría a nivel global”, comenta a el compositor Enrique Guzmán, mejor conocido como Fato.

“Se hace popular porque es una conjunción de un ritmo contagioso y una melodía alegre que no te representa ninguna dificultad cantar y que es muy sencilla de asimilar, que puedes tararear en cualquier lugar y luego escuchas en todos lados; si las escuchas tanto la terminas tarareando, cantando o te las sabes porque es música que está en el aire, la respiras, la percibes y la repites y pasa a ser parte de tu colectivo imaginario por años”, ahonda David Cortés, escritor y crítico musical.

Muchas personas mueven los pies y no el alma, coinciden los críticos, y por eso este tipo de temas llega a ser un éxito mundial, por ejemplo, el tema “Papi chulo...(te traigo el mmmm...)”, se considera como la primera canción que introdujo el reggaetón a Europa, fue una composición del cantautor panameño conocido como El Chombo, que también creó “Chacarrón”.

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“Yo como autor vivencial me preocupo porque las canciones dignifiquen al amor, a la mujer, a los padres, a la familia, a la gente, pero también hay de usos a usos, habrá gente a la que algo les dirá, hay gente que escucha este tipo de música y mueve los pies, pero no el alma y hay canciones que hacen eso”, explica.

Son fenómenos musicales difíciles de explicar, considera el compositor de “Por mujeres como tú” y “Ya no vives en mí”, como lo que sucedió con “Za za za (Mesa que más aplauda)”, que fue creada por Oscar Fuentes, un DJ y animador que trabajaba en un table dance.

“Esa canción en particular tenía jiribilla, la melodía es bonita, pero la letra es chusca, porque ‘te mando a la niña’ estás hablando de algo muy cotidiano en el hombre, no en todos, pero muchos hombres son de esos lugares, esa es la realidad”, señala Fato.

“El autor que hizo esa letra es un amigo mío, lo conozco, yo fui premiado una vez junto con el creador de esa canción en Estados Unidos, yo por ‘Mujeres como tú’ mientras que premiaban la ‘Mesa que más aplauda’ (risas)”.

Se dice que del odio nace el amor y hay composiciones de esta índole que, más allá de desaparecer se convierten en una tradición como la del “Payaso de rodeo” y “La víbora de la mar”, que forman parte obligatoria de un festejo.

“En esa sentido ya no hay nada que hacer, la tocan en cada boda y es la gente quien la convierte en parte de su vida diaria, es como la ‘Marcha fúnebre’, ¿qué de romántico hay en eso para una boda? Pero ahí está, son cosas muy extrañas y generacionales, porque son canciones que a través del tiempo han estado. ‘La cucaracha’ se convirtió en tema de la Revolución”, explica el compositor veracruzano.

También están el trabalenguas de “Aserejé”, la repetición del “Pollito pío” y el “doo doo doo” de “Baby shark”, que sirven para no pensar y sacar el estrés de las personas porque, aunque no gusten, todos en algún momento las han bailado, tarareado y con ello se han olvidado de su cotidianidad.

La excepción. El tema de “Despacito” puede ser insoportable para varios, principalmente porque al ser un éxito mundial se escuchó “hasta en la sopa”, por encima de ello, es considerada como una de las mejores letras del mundo, según los compositores.

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“Erika Ender es una de las grandes letristas, la letra no es ofensiva, la melodía es sorprendente, es muy pegajosa y si a esa melodía le ponen cualquier letra sucedería lo mismo; si desmenuzamos esa canción, tiene varias trampas lindas, porque es una canción bien hecha, bien estructurada y que no daña moralmente a las personas y es un tema que alcanzó esa penetración también porque Daddy Yankee estaba en su apogeo, siendo que Luis Fonsi no; Erika sigue en muchos lugares y premiada”.

La tragedia. “La danza de los 40 limones” también fue un gran éxito musical. Fue escrito por Juan Antonio Canta, quien al contrario de estar feliz, el fenómeno de su tema permeó en su estado anímico porque no quería llegar al éxito con ese tipo de composiciones y comentaba que quería ser considerado como un compositor respetado, pero la fama de esa canción fue más de lo que podía soportar y se suicidó el 22 de diciembre de 1996.

“Se retiró del medio porque él quería escribir canciones serías y lindas y resultó que pegó con esta tontería, entonces quedó tan traumado que dijo ‘Dios mío, si de esto voy a vivir, adiós’”, recuerda Fato.


Imprescindibles

Estos temas se convirtieron en el alma de todas las fiestas mexicanas.

Éxitos que cantamos, bailamos...y odiamos
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Macarena.

Se ubica en el puesto siete en el Billboard Hot 100 de todos los tiempos.

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“Za za za (Mesa que más aplauda)”

Su creador era DJ, trabajaba en un table dance.

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“Payaso de rodeo”.

El éxito de Caballo Dorado es un clásico bailable en cualquier fiesta.


Para los pequeños

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“Pollito pío”.

La canción de origen italiano fue lanzada en 2012 y se hizo éxito en el continente europeo y americano. La versión en español tiene más de mil millones de vistas en YouTube.

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“Baby shark”.

El video de 2016 tiene en YouTube más de 7 mil millones de vistas.


Dato

800 mil OYENTES

mensuales tiene Chombo, compositor del “Chacarrón” en Spotify.